Ť "Las herramientas de la guerra moderna son efectivas, pero costosas", argumenta
Pretende Bush incremento de 48 mil mdd al presupuesto de defensa para el próximo año
Ť De aprobarse, se destinarían en total 379 mil mdd a gastos militares en 2003
AFP
Washington, 23 de enero. El presidente estadunidense, George W. Bush, anunció este miércoles que propondrá un aumento de 48 mil millones de dólares para gastos militares en el presupuesto de defensa de 2003, en lo que será el más elevado incremento presupuestal en los últimos 20 años.
"Las herramientas de la guerra moderna son efectivas pero costosas. Sin embargo, para poder ganar este combate contra el terror, son esenciales", sostuvo Bush en un discurso ante funcionarios de la reserva militar en el que delineó su plan para el presupuesto de defensa en el año fiscal 2003.
Este plan implica un aumento de 25 por ciento respecto del monto de 2002, y que significará que se destinará un total de 379 mil millones de dólares a gastos militares en dicho año fiscal.
Bush aseguró que los fondos extras servirán, entre otras cosas, para aumentar los salarios de las fuerzas armadas, adquirir armas de precisión, misiles defensivos, vehículos no tripulados y armamento de última generación para las tropas de infantería. También se destinarían unos 10 mil millones de dólares en "reservas para tiempos de guerra".
"La compra de estas armas podría significar que nos excediéramos en nuestro presupuesto, pero no nos quedaremos cortos cuando se trata de la defensa de nuestra gran nación ", explicó el presidente
"Pedimos mucho de nuestros hombres y mujeres en uniforme y ellos merecen contar con todos los recursos y armas que necesitan para alcanzar la victoria total y definitiva (contra el terrorismo )", aseguró Bush.
Admitió en su discurso que los nuevos gastos en los que necesita incurrir la nación para fortalecer su defensa contra los ataques terroristas y la recesión desencadenada tras los atentados del 11 de septiembre, tendrán como consecuencia déficits federales por primera vez desde 1997.
Bush anunció, asimismo, su intención de aumentar considerablemente los gastos para la seguridad interior de Estados Unidos, que se agregarían a los 20 mil millones de dólares ya aprobados luego de los ataques contra el World Trade Center y el Pentágono.
Entre estos gastos de seguridad interior se prevé la contratación de 30 mil agentes federales para controlar equipajes y pasajeros en los aeropuertos, y remplazar así a las empresas de seguridad privadas que se encargaban de esto. También se quiere contratar a por lo menos 300 nuevos agentes para la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Estos gastos también incluyen la compra de equipo especial para detección de correo contaminado, necesario tras la ola de cartas con carbunco que provocó cinco muertes, y fondos que se destinarán a la modernización de los laboratorios de salud pública.
A su vez, el zar antiterrorismo, Tom Ridge, dijo que el nuevo presupuesto para esta dependencia "incluye un apoyo sin precedentes para nuestros primeros cuerpos de respuesta en la nación: la policía, los bomberos, los paramédicos", y que esto debe hacerse porque de éstos "fueron los hombres y las mujeres que murieron el 11 de septiembre defendiendo a su país".
También se prevé la capacitación de nuevos cuerpos en limpieza de correo y combate al bioterrorismo.
Analistas consideran que si se toman en cuenta los gastos adicionales provocados por los atentados y la guerra contra el terrorismo, el presupuesto para el año fiscal 2003 podría alcanzar un déficit que ronde los 100 millones de dólares, una cifra muy superior a las previsiones que hasta ahora tiene la oficina de presupuesto del Congreso.