Lunes 21 de enero de
2002 |
n El gobernador del estado acepta que los afectados tienen reticencias |
Reubicarán a las familias afectadas por el derrame petrolero ocurrido la semana pasada |
q También se rescatará las tierras de cultivo, señaló Melquiades Morales Flores |
Martín Hernández Alcántara n |
El gobierno del
estado reubicará a las familias afectadas por el derrame
petrolero ocurrido en la zona de Acatzingo la semana
pasada, declaró ayer el mandatario estatal, Melquiades
Morales Flores, quien reconoció que hay reticencia de
los damnificados a cambiar su lugar de residencia, pero
dijo que para contrarrestarla su administración
emprenderá "una gran labor de convencimiento". El jefe del Ejecutivo local señaló también que se rescatará las tierras de cultivo estragadas por la fuga del hidrocarburo. Según los últimos reportes oficiales, se calcula que resultaron arruinadas 123 parcelas, que en total suman 15 hectáreas, aunque se presume que el área agrícola afectada podría tener una medida total de hasta 20 hectáreas, comprendidas entre las poblaciones de Huixcolotla, Progreso de Juárez y Acatzingo. Señaló que las actividades de limpieza en el área dañada por el derrame de más de 600 mil litros de combustible corren a cargo de Petróleos Mexicanos, paraestatal que hasta ayer al mediodía no le había informado cuándo culminaría dicha tarea. Morales fue entrevistado ayer después de la ceremonia en que fue develada una placa en honor de Sebastián de Aparicio, en la Catedral. Allí, el mandatario de la entidad señaló que se instaurará un programa de empleo temporal para que las víctimas de la fuga petrolera puedan subsistir. Asimismo, reiteró que su gobierno, en coordinación con las autoridades municipales de la zona dañada, no va a dejar en el desamparo a los afectados. Indicó que el gobierno estatal tiene "capacidad para responder a las emergencias y necesidades de la población". Por su parte, el jefe de la Unidad de Protección a la Infraestructura y Atención de Emergencias de la Comisión Nacional del Agua, Vicente Muñoz Luna, aseguró que se mantiene una permanente vigilancia sobre los mantos acuíferos de la región donde ocurrió el derrame y que no se ha detectado contaminación por el combustible. El viernes pasado, la Secretaría de Educación Pública señaló que este lunes se reiniciará normalmente las actividades en la escuela primaria federal Plan de Guadalupe -el plantel más cercano al oleoducto que se colapsó-, donde realizan actividades 180 alumnos y seis maestros. En otro tema, Melquiades Morales dijo que todavía no tiene decididos más cambios en su gabinete de colaboradores. "Déjenme reflexionarlo con calma y tomaré la decisión más conveniente para Puebla", externó cuando los reporteros le preguntaron si incluirá a Carlos Alberto Julián y Nacer en la administración estatal. |