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Ť Los micrófonos, detectados en vuelos
de prueba poco después de llegar de EU, según diarios
Descubren dispositivos de espionaje en avión
designado para Jiang Zemin
Ť Descarta politólogo de Hong Kong implicación
de Washington o la empresa constructora Ť Intentarían funcionarios
militares chinos influir con el tema en la relación con la Casa
Blanca, dice experto francés
REUTERS Y AFP CORRESPONSALES
Londres, 19 de enero. El gobierno chino afirmó
que oficiales de su servicio de inteligencia encontraron más de
20 dispositivos de espionaje en un Boeing 767 que iba a ser designado como
avión oficial del presidente Jiang Zemin después de ser enviado
desde Estados Unidos, informaron el diario británico The Financial
Times, y el estadunidense The Washington Post, al tiempo que
Washington se negó a dar una declaración sobre este caso.
Citando a representantes chinos, el periódico británico
indicó que no está claro cuándo se introdujeron en
el aparato los micrófonos, que se dice son diminutos y que operan
por medio de satélites.
Los aparatos fueron detectados cuando el avión
emitió un extraño ruido estático durante los vuelos
de prueba que se realizaron en China en septiembre, poco después
de que el aparato llegó al país. Un micrófono fue
encontrado en un baño y otro en la cabecera de la cama presidencial.
El descubrimiento se hizo público en vísperas
del encuentro previsto entre el presidente de Estados Unidos, George W.
Bush, y Zemin, programado para celebrarse en febrero próximo en
Pekín.
Según el Financial Times, el mandatario
chino se puso furioso al enterarse de la noticia.
"Todo mundo sabe que los estadunidenses nos espían",
declaró un responsable chino. Sin embargo, añadió,
"no es seguro que el gobierno quiera usar este incidente contra Estados
Unidos, porque se supone que las relaciones están mejorando últimamente",
refirió en su edición digital el diario El País.
Material sofisticado
Expertos
militares chinos, citados por The Washington Post, señalan
que el material descubierto en el avión estaba miniaturizado, era
muy sofisticado y no tenía nada que ver con los materiales de escucha
disponibles en el comercio.
La aeronave fue construida en la fábrica Boeing,
en Seattle, y adaptada con el equipo VIP (para importantes personajes)
y la tapicería fue colocada por otra compañía.
El avión, durante todo el proceso, estuvo vigilado
las 24 horas del día por tropas chinas instaladas en el hangar de
la empresa Boeing y, de acuerdo con The Financial Times, Pekín
inició una investigación para determinar cómo pudo
haberse llevado a cabo la instalación de los aparatos de escucha.
Veinte funcionarios de la Fuerza Aérea china ya
fueron interrogados por sospechas de negligencia y corrupción, y
dos miembros de la Corporación de Exportación e Importación
de Suministros de Aviación (CASC, por sus siglas en inglés)
se encuentran bajo arresto. Asimismo, dos responsables de la empresa estatal
china encargada de la importación del aparato también fueron
detenidos.
Una fuente china dijo que en total fueron encontrados
27 micrófonos desde que el avión fue entregado en agosto
y que la nave nunca se ha usado oficialmente.
"Sé que nosotros no tenemos ninguna culpa. Todo
lo que hicimos fue poner el interior del avión", indicó Jerry
Gore, presidente de la empresa Gore Desing, de San Antonio.
Paul Harris, experto en política internacional
de la Universidad Lingnan de Hong Kong, estimó que existe incertidumbre
respecto de la instalación de los micrófonos pues es "poco
probable, o incluso imposible, que Estados Unidos esté implicado".
Harris también vio como poco posible que "Boeing
haya querido ser responsable" del mismo, según dijo este ex funcionario
de inteligencia militar estadunidense. Para Harris "podría tratarse
de algo que el gobierno chino quería instalar en el avión".
"Las grabaciones de Nixon revelaron al mundo cómo los gobiernos
quieren grabar a sus propios miembros", dijo en alusión a los micrófonos
instalados en la Casa Blanca bajo la presidencia de Richard Nixon.
Para Jean-Pierre Cabestan, del Centro Francés de
Estudios sobre China contemporánea, sería posible que altos
funcionarios militares intentaran influir con este asunto en la política
de Pekín respecto a Estados Unidos.
"Existen, a todas luces, diferencias en el seno de la
dirección del ejército y del Partido Comunista chinos sobre
la evolución de las relaciones del país asiático con
el estadunidense después de los atentados del 11 de septiembre contra
Nueva York y Washington", agregó Cabestan.
Silencio de EU
Ante este escándalo, las autoridades estadunidenses
se negaron a hacer algún comentario. "Nunca hablamos de este tipo
de acusaciones", declaró Taylor Gross, un portavoz de la Casa Blanca.
"No es el tipo de asunto que nosotros comentamos", indicó
por su parte Bill Harlow, un portavoz de la Agencia Central de Inteligencia
(CIA).
Histórica disputa
La más reciente disputa en torno al espionaje entre
China y Estados Unidos ocurrió en abril del año pasado, cuando
un cazabombardero chino F-8 y un avión espía estadunidense
chocaron al momento en que sobrevolaban el Mar de China, lo que causó
la muerte del piloto chino y obligó al aparato de Estados Unidos
a realizar un aterrizaje de emergencia en la isla china de Hainan.
El avión espía de la marina estadunidense,
del tipo EP-3 y uno de los más modernos, fue interceptado
por dos naves de combate de Pekín durante una misión de rutina
en aguas internacionales. Los 24 tripulantes fueron trasladados a un alojamiento
militar, lo que desató que las relaciones entre Pekín y Washington
enfrentaran uno de sus peores momentos.
Tras intensas negociaciones diplomáticas para liberar
a los tripulantes y hacer que China devolviera el avión, Pekín
puso como condición que Washington ofreciera una disculpa por la
muerte del piloto chino.
La resolución de la disputa se produjo luego de
que Washington, después de haberse negado a emitir una disculpa,
finalmente enviara una carta a China. Sin embargo, existieron diferentes
interpretaciones de la misiva entregada por el embajador estadunidense
en Pekín, Joseph Prueher.
Según la cancillería china, el gobierno
de Estados Unidos se lamentó por el incidente. En cambio, el Departamento
de Estado informó que en el documento se disculpaba sólo
por haber aterrizado en territorio chino sin autorización.
Es así que los tripulantes del avión espía
fueron liberados y el 12 de abril de 2001 llegaron a Hawai después
de 11 días de estar detenidos. El avión espía estadunidense
fue desmantelado y entregado a Estados Unidos por partes en julio de 2001.