Ť Culpan autoridades a narcoguerrilla de actos violentos

Dejan tres muertos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y cocaleros

AFP, DPA Y REUTERS

La Paz, 18 de enero. La violencia que sacude a la región de Chapare desde el martes pasado, a causa de los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los productores de coca, cobró en las últimas horas la vida de un campesino y dos uniformados, cuyos cuerpos fueron encontrados esta mañana en la localidad de Sacaba.

El gobierno boliviano acusó a una supuesta "narcoguerrilla" de la violencia que sacude a la población de Sacaba, y de haber secuestrado a dos oficiales, quienes figuran entre un total de siete uniformados desaparecidos.

El coronel Eduardo Guayar, comandante policial del departamento de Cochabamba, declaró a la cadena radial Panamericana que los cuerpos de un militar y un policía fueron hallados en las primeras horas del viernes a las afueras de Sacaba.

Previamente fue hallado un campesino sin vida en la misma zona, donde los enfrentamientos han dejado un total de siete muertos, entre efectivos y labriegos, así como unos 150 heridos.

El conflicto estalló el martes tras una protesta de miles de productores que se oponen a un decreto que prohíbe la venta de coca en mercados del Chapare, donde el gobierno erradicó 47 mil hectáreas de plantaciones ilegales entre 1989 y 2001.

Mientras la administración del presidente Jorge Quiroga defendió la legalidad del cuestionado decreto, bajo el argumento de que se encuadra en una rigurosa ley antinarcóticos de 1998, la Defensoría del Pueblo denunció que la medida sólo ha generado la escalada de violencia.

Guayar señaló que los efectivos fueron secuestrados la víspera por manifestantes, junto con otros cinco uniformados heridos, cuando eran evacuados en una ambulancia. El policía y el militar, añadió, habrían sido torturados antes de ser muertos por los campesinos y luego abandonados, mientras los demás lograron escapar.

"Esto se llama narcoguerrilla y el señor Evo Morales -diputado y máximo dirigente de los cocaleros de Chapare- tiene que responder al país por instigar al asesinato de soldados y policías", declaró anoche el ministro de Información y portavoz oficial, Mauro Bertero.

Afirmó que esa narcoguerrilla pretende instaurarse en el país con el fin de "defender lo indefendible", y demandó a Morales la entrega de los "francotiradores" que asesinaron a los efectivos.

Además, el gobierno demandó el retiro inmediato de los miles de campesinos congregados en la localidad. "Toda discusión está parada desde el momento en que confirmamos que los dos efectivos desaparecidos el jueves fueron torturados y ejecutados", dijo el viceministro de Defensa, Osvaldo Antezana, quien forma parte de la delegación oficial que anoche se trasladó a Cochabamba para dialogar con los líderes campesinos.

Precisó que el gobierno solicitó a los mediadores, entre los que se encuentran integrantes de la Iglesia católica y de organismos de derechos humanos, que inviten a los campesinos a abandonar de inmediato Sacaba. De no acceder a ello, dijo, serán desalojados por la fuerza.

El líder cocalero exigió al gobierno pruebas de sus señalamientos, y tras acusarlo de los acontecimientos de Sacaba aseguró que no retirará a sus huestes de la población.