¤ Por debajo de expectativas creadas por el gobierno

Asegura Banamex que es modesto el alcance del paquete fiscal de este año

ISRAEL RODRIGUEZ J.

La Ley de Ingresos, las modificaciones fiscales y el Presupuesto de Egresos para 2000 constituyen un paquete económico de alcance modesto y muy por debajo de las expectativas creadas por el gobierno a principios del año. El Congreso, por su parte, no atendió la intención de oficial de asignar recursos adicionales para disminuir el déficit fiscal para este año, lo que implica que no hay todavía una clara conciencia entre los legisladores de los desequilibrios fiscales y de la magnitud real de la deuda pública.

Lo anterior consideró el Grupo Financiero Banamex, filial del estadunidense Citigroup, al señalar que al dejar fuera de la discusión la propuesta de reforma a la Ley del Impuesto del Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Congreso optó por crear nuevos impuestos especiales, que contribuirán a complicar, aunque sólo sea durante este año, la estructura fiscal.

En torno al déficit fiscal, el grupo financiero Bilbao Vizcaya Argentaria advirtió que éste no refleja correctamente la situación de las finanzas públicas, ya que los requerimientos financieros lo superan por mucho.

El intermediario financiero hispano, precisó que si se incluyen las obligaciones y compromisos totales del sector público como los proyectos de inversión financiada diferida, el rescate de carreteras, el apoyo a deudores, entre otros el déficit público se elevará en el presente año a cuatro por ciento.

El grupo financiero Ixe, a su vez, indicó que la aprobación del paquete económico para 2002 por parte del Congreso, no implica una modificación importante en la estimación de las principales variables económicas.

No obstante, difícilmente propiciará una mejoría en la calificación crediticia de México, por parte de calificadoras internacionales como Standard and Poor's, toda vez que la posibilidad de contar con una reforma fiscal se esfumó y se limitó a una miscelánea fiscal. recordemos que hacia finales del agosto del año pasado México estuvo muy cerca de obtener el llamado grado de inversión.

La recaudación adiciona que se estima no será significativa y los ingresos públicos mantendrán un carácter volátil, ya que continuará la dependencia de éstos en el precio internacional del petróleo. Por ello, agrega Ixe, la disciplina en las políticas fiscal y monetaria será crucial para consolidar la estabilidad económica.

La reforma fiscal aprobada por el legislativo a "última hora", recaudará cerca de 65 mil millones de pesos adicionales, cifra equivalente al 55 por ciento de la propuesta enviada al Congreso originalmente por el Ejecutivo desde abril con un importe estimado de 118 mil millones de pesos que representaría el 2.0 por ciento del PIB, es decir, el importe final representó sólo el 1.1 por ciento del PIB.

Los analistas de Banamex señalaron que la no aprobación del IVA a alimentos implica que no habrá presiones de precios ligados a la reforma fiscal, y serán mínimos los relativos a los mayores impuestos en bienes de lujo, en telefonía, tabaco y bebidas, sobre todo dado el contexto recesivo.

También resultó negativo el que, al rechazar el IVA generalizado, se perdió un elemento importante de simplificación, que hubiese permitido disminuir la evasión de manera sistemática.

Los aspectos positivos, ligados al consenso logrado entre partidos, la aceptación del resultado por parte del gobierno, la obtención de mayores ingresos y las modificaciones al régimen del impuesto sobre la renta, compensan los elementos negativos de este difícil episodio de la reforma fiscal.

Estos últimos elementos se refieren a la negativa de los legisladores a aumentar la recaudación de manera más sensible y permanente, basándose más en impuestos al consumo que al ingreso, y a eliminar en lugar de aumentar, como se hizo con impuestos especiales.