Ť El BID, listo para brindar auxilio: Enrique Iglesias

Exige el Grupo de Río a organismos financieros apoyo para argentinos

DPA, REUTERS Y AFP

Santiago, 22 de diciembre. La solidaridad de las naciones de América Latina hacia Argentina continuó este sábado con el exhorto del Grupo de Río a las agencias multilaterales de financiamiento a que ayuden a este convulsionado país a superar la severa crisis económica, social y política.

Así lo expresó en un comunicado el organismo regional, en el que destacó la necesidad de que la comunidad internacional apoye a esa nación para que pueda encontrar las soluciones adecuadas que le permitan vencer sus conflictos.

El Grupo de Río expresó asimismo su confianza en que Argentina conseguirá superar la crisis con apego a la institucionalidad democrática.

La declaración fue emitida en las últimas horas del viernes en Santiago, ya que Chile tiene este año la presidencia del grupo, integrado por 19 países latinoamericanos.

De la misma manera, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Enrique Iglesias, reiteró que la institución está lista para sumarse a cualquier esfuerzo internacional para auxiliar a Argentina.

El responsable del BID resaltó que éste es un momento en el que lo más importante es desear que la dramática situación que vive Argentina sea superada y que vuelva la calma entre la sociedad. De igual manera, destacó la importancia de que se instale un gobierno con autoridad que intente resolver los problemas que tiene por delante el país.

La declaración de Iglesias fue el primer anuncio de un organismo crediticio internacional que siguió al reclamo efectuado el viernes en Montevideo de los presidentes del Mercosur para "la atención de la comunidad mundial y de los organismos e instituciones financieras, con el fin de que presten su cooperación y apoyo a Argentina con la urgencia del caso".

El apoyo, más simbólico que real, afirma Ricardo Lagos

El presidente de Chile, Ricardo Lagos, afirmó que ante la magnitud del problema "uno podría dar un gesto más simbólico que real", pero dijo que en cuanto las nuevas autoridades estén instaladas se analizará con ellas la manera en que se les puede ayudar.

De su lado, el mandatario brasileño, Fernando Henrique Cardoso, sugirió por primera vez la devaluación el peso argentino como forma de permitir al gobierno de Buenos Aires superar su actual crisis y abrir camino a la creación de una moneda única del Mercado Común del Sur.

Cardoso aseveró que si Argentina adopta un tipo de cambio flotante sería más factible una unión monetaria entre ambos países socios del Mercosur, que también integran Paraguay y Uruguay.

Por lo pronto, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, quien la víspera instó al nuevo gobierno de Argentina a que cumpla con las medidas de austeridad exigidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), evalúa con sus asesores el desarrollo de la crisis en esa nación.

Fuentes del FMI expresaron el deseo de la institución financiera de trabajar con el nuevo gobierno argentino; sin embargo, no se espera que varíe su actitud hacia esa nación ni que cambie su exigencia de que introduzca ajustes en las políticas fiscal y tributaria.

En París, mientras tanto, economistas franceses, siguiendo la misma línea del ministro de Relaciones Exteriores, Hubert Vedrime, declararon que el FMI es en buena parte el responsable de la actual crisis argentina, aunque no íntegramente.

El 5 de diciembre el Fondo Monetario Internacional rehusó entregar al gobierno de Buenos Aires un nuevo préstamo de mil 300 millones de dólares, debido al incumplimiento de varios objetivos de austeridad fiscal, lo que provocó un nuevo plan de recortes, la ira social y la dimisión del ministro de Economía y, finalmente, la renuncia del presidente Fernando de la Rúa.