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Ť Planea reinaigurar el teatro con la obra Naná
Reabre Irma Serrano el Fru Fru, tras cinco años de permanecer cerrado
MARIANA NORANDI ESPECIAL
Después de cinco años de permanecer cerrado y tras una férrea batalla legal contra el actor y productor Jorge Ortiz de Pinedo, Irma Serrano abre nuevamente las puertas del Teatro Fru Fru, ubicado en calle Donceles 22, en el Centro Histórico. Propietaria desde hace casi 30 años del inmueble, que adquirió en una subasta de Cementos Anáhuac, la actriz ha invertido más de 17 millones de pesos en la remodelación del recinto. Al respecto comenta: "Lo habían dejado en ruinas y convertido en un antro. Estaba todo pintado de negro, parecía que hacían culto al diablo. Se habían llevado las butacas y no tenía ni salida de emergencia".
Irma Serrano había rentado su inmueble a Ortiz de Pinedo, con quien tuvo grandes diferencias en torno a la forma en que el productor manejaba el teatro, motivo que la llevó a un polémico pleito legal de más dos años, obteniendo finalmente el fallo a su favor. Este sábado la actriz ofreció un coctel en el remodelado centro de espectáculos y cortó el listón de reinauguración.
Vestida acorde con los colores del teatro, dorado y carmesí, Irma se mostró contenta e ilusionada con la reapertura y recuperación de su teatro: "No podía dejar morir este lugar ya que le tengo el mismo cariño que a mi mamá o a mi papá" comentó la actriz.
El nuevo Fru Fru está decorado con terciopelo carmesí, bronces dorados, paredes de espejos e iluminado con suntuosas arañas de cristal. Un amplio lobby con piano y bar, muestra una llamativa colección de esculturas -muchas de ellas de motivo religioso-, jarrones y objetos que Irma ha aportado para la ornamentación del lugar. Unas escaleras alfombradas comunican este espacio con el teatro. En él se levanta un escenario con simuladas columnas dóricas y antorchas atenienses, palcos color grana y dorado, mesas de ónix tipo arcoiris y sillas aterciopeladas, convirtiendo este teatro en un espacio singular y un poco anacrónico.
Con capacidad para mil 300 personas, el centro tiene pensado exhibir diversos espectáculos como proyecciones de videos, presentaciones de libros, discos, actividades privadas y diversos shows. En un plazo de cuatro meses, la actriz planea reinaugurar el teatro con la obra Naná, de Emilio Zolá, con la que estrenó hace 30 años el teatro y que se mantuvo siete años en cartelera.
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