MIERCOLES Ť 5 Ť DICIEMBRE Ť 2001
Ť También recurrirían al TLCAN para impugnarla
Interpondrán amparo organizaciones ecologistas del país contra terminal aérea
PATRICIA MUÑOZ RIOS
Las organizaciones ecologistas del país interpondrán un juicio de amparo en contra de la construcción del nuevo aeropuerto internacional de la ciudad de México en Texcoco si el gobierno no presenta una resolución convincente que atienda el impacto ambiental que tendrá esa zona, e incluso prevén recurrir a instrumentos legales del Acuerdo de Cooperación Ambiental del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para tomar elementos e impugnar el proyecto, dijo el presidente del Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Gustavo Alanís.
También se refirió al caso de los dos pescadores de Michoacán, quienes por cometer actos de privación ilegal de la libertad contra inspectores de Profepa fueron sentenciados a 20 años de prisión. Sobre este caso dijo que las penas tienen que ser proporcionales a la falta cometida; además se deben tomar en cuenta las condiciones del infractor, su situación económica, la intencionalidad de los actos y la gravedad de los mismos, factores que pasó por alto el juzgador. Se tendrían, dijo, que interponer recursos legales para poder defender su causa y actuar en consecuencia.
El abogado sostuvo que los grupos ambientalistas no han tenido aún ninguna solicitud de defensa sobre este caso. En entrevista durante la inauguración del Segundo Encuentro Nacional de Ecologistas, en el que representantes de varios organismos señalaron que en los años recientes se han acentuado los problemas ambientales en el país. Alanís habló del caso del aeropuerto en Texcoco y expuso que los amparos interpuestos hasta el momento y las controversias constitucionales "son sólo el principio de una serie de acciones legales que se van a dar y que van a llegar a ser un cúmulo de recursos en contra de la construcción de esta terminal aérea".
Se van a conjuntar diversas acciones legales y constituirán todo un inventario de amparos en las próximas semanas, dijo.
En el caso de los recursos legales que promoverán los grupos ecologistas, señaló que el gobierno federal va a tener que someter por ley el proyecto del aeropuerto como tal a una evaluación de impacto ambiental, según lo establece el artículo 28 de la Ley General de Equilibrio Ecológico. Cuando se haga ese procedimiento de evaluación incluso se podría llevar a cabo una consulta pública para que el público interesado pueda manifestarse al respecto.
El procedimiento establece que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) tendrá que resolver sobre el impacto ambiental y deberá decidir entre tres opciones: "si el proyecto procede, si procede pero tiene que cubrir ciertas condiciones, o si no procede". Una vez que se tenga esta resolución, los grupos ambientalistas revisarán esta determinación, y si no están de acuerdo con la forma en que el gobierno enfrente en el proyecto en lo que se refiere a la cuestión del impacto ambiental, procederán a impugnarlo legalmente y demandarán a dicha secretaría que pida una resolución diferente al proyecto.
De la respuesta oficial dependerá que estas organizaciones acudan a otra instancia "probablemente al Poder Judicial para interponer un juicio de amparo, con la finalidad de poder revertir esta decisión". Además de esta respuesta legal existe una segunda posibilidad internacional, expresó Gustavo Alanís.
Sobre este último punto, explicó: "hay una serie de mecanismos e instrumentos que nos permiten actuar internacionalmente. El caso más claro es el artículo 14 del Acuerdo Ambiental del TLCAN, el cual establece que cualquier ciudadano puede presentar un caso en contra de cualquiera de los tres gobiernos cuando no están haciendo cumplir de manera efectiva su legislación ambiental. Tenemos esa instancia que ya la utilizamos una vez, en el caso del muelle de Cozumel, y nos resultó muy efectiva, lo estamos contemplando y tendrá que darse en su oportunidad".
Agregó que es inviable ecológicamente la opción de Texcoco para la construcción de la nueva terminal aérea, y eso se sabía con antelación, sólo que al factor ambiental no se le dieron ni la importancia ni el peso suficientes, la decisión fue finalmente de índole política; por ello tendrá una respuesta legal.
La Semarnat debe tener peso igual a otras dependencias
Alanís comentó que la relación del movimiento ambientalista con el actual gobierno es buena, pero sigue habiendo mucha presión de la Secretaría de Economía en particular con este sector. "Esa dependencia ha hecho mucha presión, no le gusta el tema ambiental, lo ve incómodo, lo ve como un obstáculo para el sector privado, el comercio, las inversiones, creo que sigue habiendo una influencia fuerte de esta dependencia y es algo que tiene que cambiar, así como el hecho de que la Semarnat tenga el mismo peso que las demás secretarias, pues no lo tiene definitivamente".
Acerca de los campesinos de Guerrero que fueron encarcelados por manifestarse en contra de la tala indiscriminada, dijo que los grupos ecologistas están convencidos de su inocencia, pues desde el principio fue claro que se les sembraron evidencias para hacerlos ver como narcotraficantes y portadores de armas prohibidas, porque estaban yendo en contra de intereses creados en la zona, en contra de quienes deforestan y lucran ilícitamente con los recursos madereros.