LUNES Ť 3 Ť DICIEMBRE Ť 2001

Ť Los Tuzos avanzaron con global de 2-2 y su mejor posición en la tabla

Pachuca se clasificó pese a perder 1-0 con Potros

Ť Tanto de José Manuel Abundis, quien recibió efusivo beso del arquero Jesús Alfaro

Pachuca, Hgo., 2 de diciembre. A dos minutos del final José Manuel Abundis se plantó en solitario ante el arquero Jesús Alfaro, pero prefirió tirarse un clavado para engañar al árbitro y encontrar un penal, con lo que Atlante apenas ganó 1-0 al Pachuca y quedó eliminado del torneo de Invierno 2001, ya que con el marcador global de 2-2 el segundo avanzó por su mejor posición en la tabla general.

Tuzos ratificó el nivel mostrado en los últimos torneos y se clasificó a semifinales en pleno festejo de su Centenario.

De esta forma pasaron los cuatro primeros de la temporada regular y el superlíder Tigres enfrentará al Cruz Azul (4), mientras Toluca (2) se medirá con Pachuca (3) en duelos nivelados.

pachuca_atlante_0o0Ante inclemente frío en el estadio Hidalgo, que no registró lleno, el duelo fue ríspido y nivelado. En el primer tiempo hubo continuas llegadas en ambas porterías, pero en el complemento los equipos bajaron el ritmo y el final fue emotivo, ya que Potros se quedó a un gol de clasificarse.

Pachuca jugó sin su arquero titular Miguel Calero, quien se lesionó durante la práctica sabatina y está en duda para los próximos encuentros.

Atlante tuvo constantes arribos a partir del minuto 15, en un cabezazo desviado de Juan Angel Paredes, y al 16 el propio delantero paraguayo quedó sin marca en el área chica y remató muy desviado, en grave falla.

Al minuto 18 se suscitó un hecho insólito: Abundis reclamó al portero Jesús Alfaro y éste le respondió con un beso en los labios.

Al 19 Paredes tiró de media vuelta ante la salida del arquero y su tiro se estrelló en el travesaño.

Pachuca despertó con dos remates de Sergio Santana, el primero fue desviado en forma acertada por el guardameta Germán Grosso.

Hasta el 44 Atlante anotó el 1-0, en un tiro lejano de Abundis, quien recuperó el esférico un poco adelante del círculo central, vio mal ubicado a Alfaro y mandó un tiro colocado que se le escapó el arquero.

Para la segunda parte Potros disminuyó el ritmo y Pachuca tuvo más llegadas. La jugada más clara fue al 67, en una media vuelta del paraguayo Hugo Brizuela que Grosso desvió con reflejos felinos y el esférico pegó en el poste derecho.

Atlante contó con suerte otra vez al 74. Brizuela disparó ante la salida de Grosso y cuando el esférico iba a las redes, el central Roberto Trotta lo despejó con una media chilena y luego se estrelló en el travesaño.

El mismo Brizuela tuvo otra inmejorable oportunidad al 87, cuando se disponía a fusilar Grosso, pero Oscar Maturín le quitó el esférico con una oportuna barrida.

El silbante Gilberto Alcalá anduvo activo con las tarjetas ante las entradas fuertes, sobre todo de los pupilos del temperamental Carlos Reinoso.

Desesperado, el técnico azulgrana realizó dos cambios hasta el minuto 90 e hizo ingresar a Carlos Sánchez y Damián Alvarez, quienes apenas si pudieron tocar el esférico. Por cierto, Reinoso había relevado a Antonio Mohamed al 69 y el argentino salió enfadado.

Alcalá mostró cinco tarjetas amarillas a los atlantistas, la primera apenas al minuto dos al también argentino Trotta, quien durante la semana declaró que no le importaba ser carnicero con tal de que su equipo consiguiera el pase a la siguiente ronda.

De Pachuca mostró el cartón preventivo al volante de contención Alfonso Sosa y al colombiano Andrés Chitiva, quien con sus desbordes por izquierda fue fundamental en el pase. Sosa, por cierto, admitió que Tuzos tuvo un mal partido. "No pudimos jugar al futbol y caímos en precipitaciones, pero Toluca es un rival que juega y deja jugar".


Ť La Máquina se impuso por categórico 4-0 y se clasificó con global de 4-2

Reaccionó Cruz Azul y avanzó a semifinales con goliza al Necaxa

Ť Oscar Conejo Pérez, baluarte en el triunfo Ť Goles de Ledezma, Mendoza, Campos y Pinheiro

MARLENE SANTOS A.

Con reacción a todo vapor, La Máquina se convirtió en el tercer equipo clasificado a semifinales y, pese a sus bajas por lesiones y castigos, pero con la motivación por las nubes, se declaró lista para enfrentar a Tigres después de remontar al Necaxa por rotundo 4-0, para el sorpresivo global de 4-2 que lo ubicó en la siguiente ronda.

De manera increíble, el siempre nervioso Marco Antonio Rodríguez, ayer en funciones de cuarto árbitro, cosechó más mentadas y silbatinas que si hubiera sido el juez central al provocar la expulsión del técnico de casa, José Luis Trejo, así como la de un niño recogebalones.

El portero Oscar Conejo Pérez con grandiosos lances fue pieza clave para impedir cualquier anotación del rival.

Los goles fueron obra de Marinho Ledezma, al minuto 10, de David Mendoza al 45, Tomás Campos asestó el 3-0 al 55 y al 90 Pinheiro culminó la faena y festejó como matador, usando su playera como capote mientras el público delirante gritaba "ooole, ooole...".

Los cementeros saltaron a la cancha del estadio Azul, lleno en tres cuartas partes, con un esquema ofensivo, obligados a jugarse el todo por el todo para reponerse del 2-0 que Rayos les asestó en el juego de ida.

Necaxa, contra la pared

cruzazul_necaxa_5d1Mientras, los rojiblancos poblaron su propia área con la intención de preservar su ventaja en el global, pero tuvieron pies de plomo y fueron superados en toda línea.

Al minuto 10 Sergio Almaguer, ubicado como centro delantero, recibió un balón y de espaldas a la meta defendida por Nicolás Navarro retrasó para el disparo de Marinho, que resultó raso y potente.

La pierna de Alex Aguinaga se interpuso en la trayectoria del esférico y lo dejó inaccesible para el veterano portero.

El juego mantuvo su tónica y en la agonía de ese periodo de nuevo Almaguer sirvió retrasado, esta vez para el defensa David Mendoza, quien hasta trianguló con el desconcertante rojiblanco Aguinaga, y de zurda fusiló a Navarro para el 2-0 al minuto 45.

Necaxa, colocado contra la pared, por fin se decidió a atacar y en tiempo de compensación del primer tiempo ganó su primer tiro de esquina.

Para el complemento ya no salió el Matute Morales, resentido de la rodilla derecha y su lugar lo ocupó Tomás Campos. También entró el contención Carlos Barra por el delantero Emilio Mora.

Sin más disyuntiva, el timonel visitante Raúl Arias ingresó a los ofensivos Montes de Oca y al argentino Alfredo Moreno.

Cruz Azul esperó el contragolpe y lo encontró al minuto 55, cuando Almaguer interceptó un tiro de castigo cobrado por Aguinaga y sirvió para el solitario Tomás Campos, quien dio media vuelta y emprendió veloz carrera para encarar a Navarro.

Aguinaga quiso alcanzarlo sin éxito y no pudo evitar que el cruzazulino bombeara el balón para decretar el 3-0.

Rayos se convirtió en un vendaval, el habilidoso Moreno estuvo cerca de la anotación, pero una y otra vez Oscar Pérez confirmó su gran momento; con excelentes lances mantuvo el cero en su meta.

Los nervios hicieron que Trejo rebasara su área técnica y el cuarto juez de manera quisquillosa pidió su expulsión, que de inmediato obedeció Felipe Ramos Rizo.

Muy enojado Trejo fue hasta Marco Antonio Rodríguez, quien ya había expulsado a un niño recogebalones por haberse tardado en devolver la pelota; casi lo jaló para cuestionarle el motivo de su expulsión, mientras el sector más próximo del público insultaba al nazareno apodado Chiquidrácula.

Al 65 Cruz Azul hizo su último cambio. Salió Ledezma e ingresó Norberto Angeles; enseguida Ramos Rizo expulsó a Pablo Galdames y más tarde al necaxista Montes de Oca, para dejar a ambos equipos con 10 hombres.

Al 90 Campos alcanzó un balón por el extremo izquierdo, centró hacia Pinheiro que casi sin ángulo sacó su disparo para el definitivo 4-0.