Lunes en la Ciencia, 3 de diciembre del 2001


 

Evitar los efectos colaterales es un objetivo aún por perfeccionar

Modifican microbio para devorar tumores de cáncer

Steve Connor/The Independent

Según lo muestra un estudio, un microbio que normalmente vive en la tierra ha sido modificado genéticamente para destruir tumores cancerosos y dejar el tejido saludable. Los científicos encontraron que el microbio, una bacteria llamada Clostridium novyi, puede invadir y matar a las células que se multiplican de tumores grandes y sólidos y, eventualmente, causar el encapsulamiento y la desaparición del cáncer.

Los especialistas en cáncer afirman que todavía es necesario hacer más trabajo de investigación antes que la experimentación clínica en humanos pueda empezar, pero los resultados preliminares son muy alentadores.

cancer_mice_m27n1aUn equipo de investigación encabezado por Bert Vogelstein, de la Escuela de Medicina Johns Hopkins, en Baltimore, Maryland, usó la bacteria con medicamentos convencionales anti-cáncer en un tratamiento que llamaron terapia de combinación bacteriolítica Cobalt.

"Las conclusiones... mostraron que los resultados de Cobalt pueden provocar la regresión rápida y dramática de tumores experimentales en ratones", señalaron los investigadores en la publicación Proceedings of the National Academy of Science.

"Incluso tumores relativamente grandes podrían ser tratados exitosamente con Cobalt, sin embargo, tumores del tamaño de los usados en nuestros experimentos no responden bien, en términos generales, a los agentes quimioterapéuticos", dijeron los investigadores.

El equipo del doctor Vogelstein probó 26 cepas de bacteria por su capacidad para destruir tumores, pero encontraron que la C. novyi "parece particularmente prometedora".

Normalmente la bacteria produce una toxina altamente letal, pero los científicos modificaron genéticamente el ADN del microbio para remover el gene de la toxina. Entonces, inyectaron esporas de la bacteria en ratones con tumores grandes. Dentro de las 24 horas siguientes los tumores empezaron a romperse y a encogerse. Los científicos afirmaron que el efecto era "significativo y prolongado". Los tumores se descompusieron y de convirtieron en cicatrices negruzcas, dejando los tejidos alrededor sin daño hasta que desaparecieron después de dos semanas de tratamiento.

Los tumores sólidos son difíciles de tratar con terapias convencionales, debido a sus células densamente empacadas en una barrera natural que es difícil de penetrar. Las bacterias de la tierra están perfectamente adaptadas a vivir en un medio ambiente privado de oxígeno y los científicos creen que esas bacterias pueden perfectamente vivir dentro de un tumor. Sin embargo, los investigadores admiten que no entienden del todo cómo funciona el tratamiento. "Es claro que muchas preguntas permanecen", afirmaron. "Por ejemplo, no se han entendido las bases para la potente muerte de células en la cercanía de la bacteria germinante".

Otros tipos de bacteria capaces de germinar y creer adentro de los tumores no exhiben esta habilidad para destruir las células cancerosas y la habilidad asesina de la bacteria Clostridium evidentemente no se debía al gene de su toxina.

Algunos de los ratones experimentales murieron poco después después de haber sido "curados" de sus tumores, posiblemente como un resultado de los productos tóxicos liberados por la rápida destrucción de las células cancerosas.

Uno de los problemas que los científicos todavía tienen que abordar es cómo evitar los efectos colaterales de la destrucción rápida del tumor, antes de que los ensayos clínicos en voluntarios humanos puedan comenzar.

"Esperamos que esta investigación añada una nueva dimensión al tratamiento contra el cáncer, pero darnos cuenta de que la manera en que los tumores responden al tratamiento en ratones puede ser diferente en humanos", afirmó el profesor Kenneth Kinzler, un integrante del equipo de investigación.

© THE INDEPENDENT

Traducción: Patricia Vega


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