SABADO Ť Ť DICIEMBRE Ť 2001

Ť Supera 10 millones de libras esterlinas

Pagan precio récord por Omai, pintura de sir Joshua Reynolds

Ť El artista retrató en 1774 a un joven nativo de Tahití

ANNA WHITNEY THE INDEPENDENT

Londres, 30 de noviembre. Omai, retrato que sir Joshua Reynolds hiciera de un joven nativo de Tahití, que fue celebrado por la sociedad londinense del siglo XVIII, resultó subastado el pasado miércoles en Sotheby's por un precio récord superior a 10 millones de libras esterlinas. La obra simboliza una era que presenció avances sin precedente en los viajes, el comercio, las ciencias y la filosofía, y representa al joven en vestiduras ondulantes.

La puja fue la primera de su tipo desde los ataques terroristas del 11 de septiembre y la pintura es la más cara vendida en Londres este año. Omai obtuvo 10 millones 343 mil 500 libras esterlinas, seis y medio veces más de lo que previamente había sido pagado en una subasta con obra de dicho artista.

Reynolds pintó Omai poco después de la llegada del tahitiano a Gran Bretaña, con la flota del capitán Cook, en 1774. El retrato de Omai fue parte de la colección personal de Reynolds hasta la muerte de éste, ocurrida en 1792. Unos meses después fue adquirido por Frederick Howard, quinto conde de Carlisle. Permaneció en la colección en Castle Howard, North Yorkshire, hasta su venta, cuando fue comprado por un negociante londinense, Guy Morrison.

Simon Howard, actual dueño de Castle Howard, estaba ''tirando al blanco'' cuando escuchó la noticia y dijo que se sentía ''absolutamente encantado''.

David Moore-Gwynn, responsable del departamento de pinturas británicas de Sotheby's, expresó: ''Siempre creímos que ésta era una de las más grandes pinturas británicas jamás realizada. Es casi lo mejor que ha salido al mercado en los últimos 30 años''.

Omai fue llevado a Inglaterra en 1774 en uno de los barcos del segundo viaje de Cook. Moore-Gwyn dijo que el retrato había sido visto como la personificación de la idea dieciochesca del ''noble salvaje''.

La novelista Fanny Burney escribió en sus diarios: ''Sus modales son tan extremadamente elegantes y él es tan cortés, atento y tranquilo que parece más bien proveniente de alguna corte extranjera''.

Al regresar a Tahití, con el capitán Cook, Omai causó sensación al pasearse en caballo, animal desconocido allí; repartir regalos y contar historias de sus viajes. Falleció a los dos años de la partida de Cook.

En la subasta, la representación que hiciera en 1889 John William Waterhouse de la dama desolada Ofelia se vendió en 2 millones 38 mil 500 libras esterlinas, más de 200 mil sobre el precio de salida.

Traducción: Merry Mac Masters

Copyright: The Independent