Ť La Semarnat no puede interceder a su favor, pues ello depende del Poder Judicial, dice

La pena de 20 años de cárcel a los pescadores de Pátzcuaro, ''una exageración'': Lichtinger

Ť Se necesita una orden del Presidente de la República para intervenir en este caso, señala

ENRIQUE MENDEZ

Los pescadores Leocadio Ascencio y Aurelio Guzmán cometieron un delito, pero la pena de 20 años de prisión que se les impuso ''es una verdadera exageración'', afirmó ayer el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Víctor Lichtinger.

''Es un caso en el que hubo un delito en contra de gente de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa)'', recordó, y a pesar de su evaluación sobre la sanción dijo que la dependencia no puede interceder a su favor porque reducirla ''es un caso complicado'' que depende de una decisión judicial.

''Se necesita una orden del Presidente de la República para intervenir'', señaló en referencia a los recursos que se han interpuesto contra la condena de 20 años en contra de Ascencio y Guzmán por el delito de ''privación ilegal de la libertad'' contra funcionarios de Profepa.

El 2 de marzo de 2000, los biólogos Francisco Mendoza García y Ulises Pech Rivera fueron detenidos por habitantes de Pátzcuaro, luego de que al intentar imponer la veda del pescado blanco en el lago se les descubrió destruyendo las redes.

La comunidad y los defensores de Aurelio Guzmán y Leocadio Ascencio han agotado todas las instancias; se acercaron a los candidatos durante la pasada campaña por la gubernatura de Michoacán e incluso iniciaron la recolección de firmas para enviárselas a Vicente Fox pidiendo la liberación de los pescadores.

Protección ''de papel''

Lichtinger fue entrevistado después de la presentación del programa de trabajo de la Comisión Nacional de Areas Protegidas (CNAP), en los Viveros de Coyoacán, donde reconoció que hasta ahora la protección a las zonas decretadas como reservas no ha sido ''de verdad, una realidad'', sino que es ''de papel''.

El funcionario, quien llegó a la ceremonia con el pie izquierdo enyesado, dijo que a pesar de las restricciones económicas la Semarnat está ''de pie y caminando firmemente'' para que al final del sexenio 10 por ciento del territorio sea considerado como área natural protegida.

Además de que la secretaría no cuenta con un mecanismo para evaluar ''de manera cabal'' el impacto de la sociedad en las áreas protegidas, como reconoció el presidente de la CNAP, Ernesto Enkerlin, Lichtinger refirió que el presupuesto destinado a la protección ambiental está ''muy relegado''.

De hecho, agregó, el presupuesto de 13 mil 390 millones de pesos propuesto a la Cámara de Diputados por el gobierno federal para 2002 es 7.9 por ciento menor, en términos reales, al que se ha ejercido durante este año. En ese contexto consideró ''fundamental'' que el Congreso discuta la reforma hacendaria planteada por el Ejecutivo. ''Hay que darle la posibilidad al gobierno federal y a los gobiernos de los estados de tener más recursos, porque el Estado tiene una responsabilidad social muy importante'', sostuvo.

Por la tarde, de acuerdo con un comunicado de la secretaría, Lichtinger se reunió con los gobernadores del estado de México, Arturo Montiel; Jalisco, Francisco Ramírez Acuña; Michoacán, Víctor Tinoco Rubí; Querétaro, Ignacio Loyola Vera, y Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks, para ''acordar las estrategias'' de recuperación de la cuenca Lerma-Chapala.

Según el comunicado, en la reunión se planteó la puesta en marcha del programa para la sustentabilidad de esa cuenca, ''con el cual se pondrá fin al desbalance (sic) entre la oferta y la demanda de agua que se presenta en esa región''.

Pendiente, solución en Chimalapas

También, en un rápido balance sobre el primer año de gobierno foxista, Lichtinger dijo que la dependencia no ha podido consolidar proyectos, como el de decretar a los Chimalapas como área natural protegida. Esto se debe, explicó, a que se mantienen los problemas agrarios y de división política entre Oaxaca y Chiapas, lo que impide garantizar la tenencia de la tierra. Algo similar ocurre en Montes Azules, dijo, donde las constantes invasiones de predios le han impedido a la secretaría ''meterse de lleno'' para proteger esa zona.