MIERCOLES Ť 28 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Una fiscalía especial investigará actos de tortura y desapariciones
Fox: hacer justicia no desacredita a un Ejército que es del pueblo
Ť Recibe el informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos
JUAN MANUEL VENEGAS Y VICTOR BALLINAS
Hacer justicia ''no desacredita a un Ejército que es del pueblo y para el pueblo'', enfatizó el presidente Vicente Fox, al anunciar ayer la creación de una fiscalía especial que ''investigará y sancionará'' a los responsables de actos de tortura y desapariciones por motivos políticos en las décadas de los 70 y 80. Incluso, advirtió que la apertura de los archivos sobre aquellos acontecimientos es también un derecho de las familias de los miembros de las fuerzas armadas que cayeron en la época de la llamada guerra sucia y cuyas muertes, de igual forma, ''deben ser perfectamente esclarecidas''.
Convencido -como se dijo- de que ''no hay razón de Estado que pueda estar por encima del estado de derecho'', Fox subrayó que, poco a poco, en México ''estamos cambiando la manera en que se ejerce el poder'', y señaló que la idea de crear esa fiscalía no significa que ''estemos persiguiendo los espectros de nuestra historia'', sino ''dando un gran paso hacia la consolidación del estado de derecho y sentando las bases para erradicar, definitivamente, la impunidad''.
Cabal cumplimiento a la recomendación
Sobre este punto plasmó su compromiso de dar ''cabal cumplimiento'' a la recomendación que sobre desapariciones y tortura hizo al Ejecutivo la Comisión Nacional de Derechos Humanos. ''Los documentos contenidos en el informe especial que hoy se nos presenta serán un elemento decisivo para la investigación y, en su caso, la formal denuncia de estos hechos dolorosos de nuestro pasado reciente'', confió.
En un acto que el ombudsman nacional, José Luis Soberanes, organizó en lo que fuera la cárcel de Lecumberri -el palacio negro de la época investigada-, Fox convocó a una buena parte de su gabinete legal y ampliado, encabezados por sus secretarios de Defensa, Ricardo Clemente Vega García; de Gobernación, Santiago Creel, y el procurador de la República, general Rafael Macedo de la Concha.
Los tres cumplieron ayer, y tendrán en lo sucesivo, gran parte de la responsabilidad de que el anuncio de la creación de la fiscalía -que se institucionaliza a cambio de la oferta foxista inicial de una comisión de la verdad- se traduzca en hechos y resultados.
Vega García y Creel Miranda estamparon su firma, junto a la del presidente Fox, para la aprobación del acuerdo con el que se da forma y facultades a la próxima instancia investigadora, en tanto que las dependencias a su cargo tienen los archivos que son ''fuentes relevantes para el esclarecimiento de los sucesos'' de la guerra sucia, como explicó en la lectura del acuerdo presidencial el titular de Gobernación.
Ambas dependencias -indica el texto presentado por Creel- transferirán al Archivo General de la Nación la totalidad de los archivos, expedientes, documentos e información en general que actualmente se encuentran bajo su custodia sobre el periodo de tiempo que se investigará; la Procuraduría General de Justicia Militar también quedó instruida para proporcionar a la PGR la información que ésta le requiera.
Además, Gobernación tendrá la encomienda de conformar un ''comité interdisciplinario'' que tendrá por objeto ''el estudio, análisis y presentación de propuestas para determinar la forma, procedimientos y términos para brindar, cuando ello proceda, una reparación administrativa justa a las víctimas y ofendidos de los hechos del pasado a que se refiere'' el acuerdo por el que se ordena investigar y sancionar a los responsables de las desapariciones forzadas en los 70 y 80.
Por su parte, Macedo de la Concha tiene la instrucción presidencial de nombrar a quien se hará cargo de la fiscalía y de convocar a la creación de un ''comité de apoyo'' (independiente de la PGR) que aporte al fiscal ''elementos históricos, sociales, políticos, jurídicos y demás necesarios para el debido cumplimiento de sus funciones''.
El artículo primero del acuerdo señala que el Ministerio Público de la Federación se encargará ''de concentrar y conocer de las investigaciones; de integrar las averiguaciones previas que se inicien con motivo de las denuncias formuladas por hechos probablemente constitutivos de delitos federales, cometidos directa o indirectamente por servidores públicos contra personas vinculadas con movimientos sociales o políticos, así como de perseguir los delitos que resulten ante los tribunales competentes''.
El pasado debe revisarse, ''lo prometí en campaña y lo cumplo. Por eso hay que ir más allá de la idea de una comisión de la verdad y aspirar no sólo a conocer las conductas y omisiones del pasado, sino también a sancionarlas. Eso es posible mediante la intervención de las instancias encargadas de la procuración y administración de la justicia'' que, ofreció, actuarán y cumplirán su tarea con ''imparcialidad e integridad''.
La apertura de información reservada y la búsqueda de justicia ayudarán a sanar heridas históricas de la sociedad mexicana, no a reabrirlas, consideró el mandatario, y manifestó su confianza de que la decisión que ayer tomó ayudará ''a ver con más confianza hacia el futuro, a que se desarrolle un nuevo proyecto de nación plural, tolerante, incluyente, en el que no quepan la impunidad, la división ni la confrontación''.
Con esta idea el Presidente hizo énfasis en que los archivos estarán también a disposición de los familiares de soldados y mandos militares que murieron en esa época, pues ''el velo que cubrió aquellos acontecimientos resultó perjudicial para todos y nuestras fuerzas armadas, que cumplen con lealtad, valor y disciplina su misión, son las primeras en honrar las instituciones, en reconocer que nadie debe estar por encima de la ley, y que hacer justicia no desacredita a un Ejército que es del pueblo''.
En su mensaje, Fox empezó por advertir que la nueva fiscalía representa ''un acto trascendental en la vida política del país, un acto que nos ayuda a reflexionar sobre nuestra historia reciente y también sobre la nación que queremos construir''. Y ratificó el compromiso de su gobierno con la ''transparencia en el manejo de la información'' y con el ''absoluto respeto a los derechos humanos''.
Recordó que en el año que va de su administración se ha promovido ante el Congreso la aprobación de 13 diferentes instrumentos internacionales en materia de desaparición forzada de personas, tortura, derechos de los niños y las niñas, eliminación de la discriminación contra la mujer y protección a víctimas de conflictos armados internacionales. Actualmente, pugna además por la ratificación del estatuto de la Corte Penal Internacional.
Pero los ''esfuerzos en el plano internacional'' no pueden ser legítimos si no existe el mismo compromiso dentro de nuestro propio territorio: ''šNo podemos ser farol de la calle y oscuridad en casa!''
Indicó que sigue ''con atención y preocupado'' las investigaciones del caso Digna Ochoa, reiterando que la PGR ofrece todo su respaldo a las pesquisas que lleva a cabo la procuraduría capitalina.
''Hay que ir a fondo en esa investigación y encontrar a los presuntos culpables, porque no podemos tolerar que existan grupos que atemoricen a los defensores de los derechos humanos, (que es) uno de los temas más sensibles en el horizonte mundial y compromiso irrenunciable del gobierno federal'', expresó.
Al hablar sobre la fiscalía especial hizo un reconocimiento a la labor de la CNDH y a todos los mexicanos que no claudicaron en su exigencia para que ''esta hora llegara''; a todos los ciudadanos que no cejaron en la ''búsqueda de la verdad histórica'', y a la ''contribución de las mujeres y los hombres que se negaron a olvidar''.
Agregó: ''Los gobiernos que actúan con puertas abiertas, dispuestos a la fiscalización ciudadana, tienen márgenes muy reducidos para caer en tentaciones autoritarias. La ausencia durante años de información oficial acerca del paradero de muchos y muchas mexicanas es el símbolo más exacto y terrible de lo que pueden permitir autoridades que no están bajo el escrutinio constante de la ciudadanía. Ahora estamos dando la bienvenida a una era donde la verdad no se escatima a nadie, en donde se levanta el manto de la oscuridad y se abre lo que estaba cerrado... Para una efectiva revisión del pasado debemos confiar en las instituciones. México fue capaz de lograr la alternancia política sin romper el marco jurídico que le da certeza a nuestra vida ciudadana. šEsa es también la única manera efectiva de combatir la impunidad!''.