MARTES Ť 27 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť El panista gestiona el indulto presidencial para dos sentenciados a 20 años de cárcel

Noé Navarrete, el diputado encargado de frenar la inconformidad de pescadores en Janitzio

 MIREYA CUELLAR Y ROSA ELVIRA VARGAS ENVIADAS

Janitzio, Mich. En el corredor de las oficinas de la tenencia de Janitzio la voz del diputado Noé Navarrete pasaba de la conmiseración a la amenaza: "Alegaremos que el doctor Aurelio es primodelincuente y que no representa peligro para la sociedad, pues no ha matado a nadie. Enviaremos las firmas de apoyo de los médicos de la región para que se anexen al expediente. Informaremos cuántas mujeres atendía aquí...".

Seguía en esa tesitura, pero le ganaba su vena autoritaria: "Miren, no compliquen el asunto. No soy nadie para exigirles que no hagan la marcha, pero sí es mi obligación señalar que esa medida podría complicar el procedimiento del indulto".

Llegado al Congreso federal cuando el panismo local abrió sus herméticas estructuras, Navarrete es oriundo de Pátzcuaro. Conoce casi desde su origen el conflicto de los pescadores sentenciados a 20 años por privación ilegal de la libertad. Sabe que se trata de un problema social y no de delincuencia común.

Pero su rol ha sido ambivalente, de apoyo y de contención. Por un lado asegura que que trabaja por los pescadores; por otro, los ha frenado a la hora de difundir el caso y organizar movilizaciones.

El 10 de noviembre, Navarrete llegó a Janitzio con Rogelio Séptimo, uno de los abogados contratados por la comunidad para defender a Aurelio Guzmán Mateo y Leocadio Ascencio Amaya.

El litigante explicó los términos en que se rechazó el amparo promovido y la ratificación de sentencia, con lo que se agota la instancia legal para apelar de la condena de 20 años.

Expusieron lo que se sabía: ahora la única salida es el indulto presidencial.

Tras la explicación jurídica, Navarrete dijo a los pescadores que la liberación de los ecologistas presos en Guerrero, Teodoro Cabrera y Rodolfo Montiel, era una señal favorable para la causa de Aurelio y Leocadio, "porque no sé si ustedes escucharon ayer en el noticiero de Televisa en la noche, cuando Santiago Creel dijo que había una lista de otros posibles beneficiarios de una medida así, aunque se reservó los nombres''.

"Tú sabes, Presidente"

Insistió en que ha planteado el tema al gobierno y que ha pedido ?sobre todo al Presidente? que cumpla el ofrecimiento de ayuda que hizo a familiares de los pescadores cuando éstos lo abordaron el 17 de marzo durante una gira por Michoacán.

"En la presentación del Programa de Energía, en Los Pinos hace unos días, le mostré a Vicente la foto de ellos. Me dijo: 'está muy bonita, pero de qué se trata'. Le respondí: 'tú sabes, Presidente, de qué se trata; es el caso de los pescadores que te plantearon y al que te comprometiste en marzo'. Entonces me pidió que le diera los datos para que se analice el caso. Eso a mí me da muchas esperanzas'', citó Noé.

Pero enviar el expediente y los pormenores del caso a instancias del gobierno federal para los pescadores representa una burla, pues han expuesto el tema ante oficinas jurídicas de la administración foxista.

Navarrete comentó: "Creel me pidió el otro día los nombres de los pescadores para que Gobernación vea el asunto''. Está tan seguro de la buena fe de sus "contactos'' y del éxito de sus gestiones, que el miércoles 7, durante el mitin de cierre del candidato a gobernador del PAN, Salvador López Orduña, llegó a decirle al corresponsal de La Jornada Ernesto Martínez Elorriaga, que "eso ya está; como no se les puede otorgar la amnistía, se les concederá el indulto. El martes (13 de noviembre) ya estarán libres''.

Ante los pescadores ese martes no se atrevió a repetir la afirmación, pero persistió en disuadir cualquier movimiento de presión (se estaba organizando una marcha para el martes 13) por los compañeros y familiares de Aurelio y Leocadio. Para ello llevaba un as bajo la manga: la víspera los había visitado en la cárcel y obtuvo, al menos de parte del doctor, su promesa de inhibir la marcha.

Los alegatos de Navarrete colmaron la paciencia de su auditorio. Todas las intervenciones fueron para espetarle el largo récord de gestiones fallidas y expresiones desafortunadas, como haber dicho que la sentencia de 20 años era una cosa buena porque así habría más forma de abogar por ellos.

"Este es un problema social. Este no es un conflicto sólo de la isla, es de toda la región. Hemos esperado mucho, ellos no son delincuentes, son indígenas que no han matado a nadie. Son pobres que lo único que hicieron fue defenderse de aquellos que nos destrozan las redes que tardamos hasta siete meses en tejer'', le decían.

Apuntaban también que el presidente Fox no ha entendido de qué se trata esto y no lo ha atendido. Que Aurelio es un hombre que siempre estuvo al pendiente de la salud de las mujeres y los niños de Janitzio y que ahora, cuando hay alguna emergencia, tienen que llevarlos en lancha a Pátzcuaro. Que cómo es posible que tengan a dos hombres buenos en la cárcel mientras los delincuentes de cuello blanco están libres.