Los ganadores
Ť Colombia Moya
SER UN GANADOR o un perdedor en la actual cultura preamericana, que vive una inmensa mayoría de países en el mundo, instigados por la ley de la competencia o la vergüenza de ser perdedor, que diariamente se absorbe por medio de la televisión y el cine que importamos en irremediables cantidades, no es más que un mito fabricado por la perversa mercadotecnia de los comerciantes. Así pues, colocándonos en el lado humano y real de los ganadores y perdedores de la danza en México, yo digo, como se usa entre los deportistas de buena cepa, que lo importante es el juego de competir.
QUIZAS PORQUE AUN en México los ganadores, triunfadores o simplemente gente con talento no siempre son reconocidos y muchas veces hasta son ahogados, borrados, silenciados, al contrario de lo que sucede en Estados Unidos, por ejemplo, donde a veces basta tener una buena idea para que fama y fortuna abonen un futuro menos áspero, el premio es siempre el premio. Significa el reconocimiento, la promesa, una buena carta de presentación por más que, no pocas veces, jurados y opiniones se confabulen en las sacrosantas cofradías requeteconocidas para emitir calificaciones afines.
DE TODOS MODOS, los ganadores del vigésimo segundo premio INBA-UAM de composición coreográfica -se presentaron el domingo en el Teatro de la Danza, en el Centro Cultural del Bosque- deben sentirse muy satisfechos de haber obtenido tan codiciada presea.
LOS PREMIOS FUERON otorgados en tres categorías, A, B y C, luego de una preselección realizada por un jurado especial, para por último, en competencia final, otro jurado, decidiera por los ganadores en cada una de las mencionadas categorías.
ASI, LA CATEGORIA A, comprende a coreógrafos experimentados, cuya primera obra fuera presentada públicamente hace más de 10 años, trayectoria comprobable, sin importar la procedencia de los mismos, la cual puede ser de cualquier país del mundo ya que el concurso INBA-UAM, después de algunos años, se convirtió también en internacional.
LA CATEGORIA B comprende a los concursantes, cuya primera obra tuviera menos de 10 años y más de tres, de haberse presentado ante un público formal.
LA CATEGORIA C incluyó a aquéllos cuya obra tuviera menos de tres años de haber debutado.
Entrega de premios
DE ESTE MODO el pasado 17 de noviembre, en el Palacio de Bellas Artes se presentaron las obras finalistas del concurso, y se procedió a la premiación de los ganadores.
IGNACIO TOSCANO, DIRECTOR DEL INBA; Enrique Arriola Wong, director de Difusión Cultural de la UAM (Universidad Autónoma Metropolitana), y Héctor Garay, coordinador nacional de Danza del INBA, así como Tomás Ejea, jefe de Artes Escénicas de la UAM, presenciaron la entrega de premios de manos de Gustavo Emilio Rosales, Marcela Sánchez, Rosario Manzanos y Javier Barreiro Cavestany.
DAVID BARRON OBTUVO el primer lugar por la obra Frágil paraíso, en la categoría A. El segundo lugar fue para Gerardo Luna por El luna, en la misma categoría.
EN LA CATEGORIA B, el primer lugar fue para Mauricio Nava, con Propuesta No. 9, todo lo que usted siempre quiso saber acerca de los tres hombres que pretendían volar, pero temían preguntar. En segundo lugar quedó Gregorio Trejo, por Réquiem.
EN LA CATEGORIA C se premió a María Laura Saldívar, por De tal palo tal astilla; en segundo lugar, a Marco Antonio Silva Vasconcelos, por Voces blancas y un grito. También fueron reconocidos como mejores intérpretes Erick Montes, y Tzitzi Benavides, así como Diego Vorrath, por mejor iluminación, y Ernesto Pérez, por mejor música original.
NO SE QUE esperan los bailarines de ballet para instalar un concurso de creación coreográfica en este estilo a fin de renovar y alentar este renglón, ya que es muy necesario si se quiere llegar a tener una expresión propia, moderna, contemporánea de la danza clásica. Lo que hace falta ahora son nuevos coreógrafos de ballet. Si no, recuerden a Jiri Kilyan, a Duato, etcétera.