LUNES Ť 26 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť La astrónoma cuenta su experiencia en ese ámbito
En México la ciencia es poco popular, afirma Julieta Fierro
Ť Salir a las calles para llevar el conocimiento a la gente de escasos recursos, su principal estrategia
KARINA AVILES
En la oficina que ocupa como directora de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, rodeada de libros, dulces y juegos, Julieta Fierro explica entre sus recuerdos pasados y presentes cómo se puede llevar el conocimiento a la ciudadanía. En síntesis, cómo popularizar la ciencia. De hecho, su esfuerzo fue reconocido recientemente con el Premio Latinoamericano de la Popularización de la Ciencia y la Tecnología 2000-2001 de la UNESCO.
"Yo empecé a hacer estas cosas en las ferias del libro. Tenía un espacio para hacer experimentos, pero šlos niños no llegaban! Yo me ponía fúrica con los organizadores y lo que hice fue llevarme mis patines a la feria cuando ésta era en el Auditorio Nacional. Me ponía a patinar y los niños salían corriendo detrás de mí y las mamás, histéricas, atrás de los niños. Los llevaba a mi lugar y entonces, hacíamos los talleres. Después, mis colaboradores se fueron entusiasmando y también se pusieron los patines".
Horrorizada de tan sólo pensar que las maravillas del universo no fueran conocidas por cualquier persona, Julieta Fierro comenzó a llevar las estrellas y las lunas a los espacios públicos.
Va al Metro a llevar exposiciones y cual merolico -como ella dice- jala a la gente para que se acerque; pone un taller de ciencia en un parque o se viste de hada o acude a las colonias marginadas y a las escuelas primarias para exponer sobre la naturaleza.
Hace apenas unos días, rechazó estar en el presídium de la inauguración de un acto de ciencia en Mérida y, en su lugar, optó por ir a una escuela de muy bajos recursos asociada a un penal, porque está consciente de que ahí es "donde realmente me necesitan". De entre un grupo de pequeños, una niña le reclamó que en lugar de explicar la gravedad dijera por qué hay fuerza de gravedad. "Esto -subraya- es lo que Einstein quería saber."
En otra ocasión fue a un parque a explicar el funcionamiento de los cohetes de propulsión con un tubo de ensayo y un alka-seltzer. Los niños de la calle que merodeaban por el lugar se acercaron, "dejaron su cajita de chicles a un lado y estaban más interesados en el experimento que los niños con recursos económicos; los primeros preguntaban más".
La científica afirma que la ciencia en México está "casi nada" popularizada.