LUNES Ť 26 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Actualmente existen 127.9 millones de hectáreas con cubierta vegetal natural
Perdió México 30% de bosques y selvas en 40 años
Ť Reporta el Inventario Nacional Forestal 2000-2001 extinción de 47 especies de flora y fauna
ANGELICA ENCISO L.
En 40 años, el país perdió alrededor de 30 por ciento de bosques y selvas. Actualmente hay 127.9 millones de hectáreas, 66 por ciento del territorio nacional, con cubierta vegetal natural en diferentes grados de conservación, indican los primeros resultados del Inventario Nacional Forestal 2000-2001.
En los dos últimos años se reforestaron 200 mil hectáreas, apenas la sexta parte de las que se perdieron en ese periodo, ya que la tasa de deforestación anual es de 600 mil hectáreas. La contribución de las plantaciones comerciales a la recuperación vegetal es mínima, ya que entre 1996 y 1998 apenas se plantaron 33 mil 476 hectáreas.
De la superficie forestal, alrededor de 20 millones de hectáreas son bosques, 17.7 millones son selvas, cerca de 47 millones son matorrales de zonas áridas, 5.3 millones son vegetación halófila y gipsófila, mientras que 34 millones están pobladas de vegetación secundaria alterada. A esta superficie se suman alrededor de 3 millones de hectáreas que incluyen manglares, palmares, dunas costeras, vegetación acuática y páramo de alta montaña.
Entre las causas que provocan la deforestación están el cambio de uso del suelo para fines agropecuarios o para ganadería extensiva, la cual se presenta sobre todo en el norte del país, donde 95 por ciento de los pastizales naturales y 70 por ciento de los matorrales de zonas áridas se encuentran sobrepastoreados.
La degradación también se manifiesta en una reducción en la densidad, la cobertura y la productividad de la vegetación, así como por cambios negativos en la composición y abundancia relativa de especies, tanto de plantas como animales. Los incendios forestales también son causa importante de este problema. Tan sólo entre 1991 y 1998 se perdieron 276 mil hectáreas, de las cuales 34 por ciento fueron bosques y selvas, y el resto pastizales, indica el Programa Nacional de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
La deforestación, la degradación ecológica y el cambio de uso del suelo forestal para actividades agropecuarias representan una amenaza para la persistencia de los ecosistemas, la biodiversidad y las especies endémicas, así como para el mantenimiento de procesos ecológicos que configuran servicios ambientales como la recarga de mantos acuíferos, la conservación del suelo y la captura de carbono.
La pérdida de bosques trae asociada la desaparición de flora y fauna. En el mundo, indica el documento, se estima que se han perdido 910 especies en total, de las cuales 47 corresponden a México: 15 plantas, 19 peces, un anfibio, ocho aves y cuatro mamíferos.
Agrega que el proceso de desaparición de las especies se dio a partir del siglo XVII, pero la mitad de éstas ocurrió en el siglo pasado, con lo que la tasa de extinción promedio para el siglo XX fue de 5.6 especies por año, lo que corresponde a una tasa cinco veces mayor que la absoluta promedio de pérdida natural calculada en una especie por año.
Sumado a esto están los procesos de degradación del suelo, entre los que se cuentan el deterioro hídrico, que afecta 37 por ciento del territorio nacional, y la erosión eólica, que daña 15 por ciento de la superficie del país.
También se agrega la degradación química, como la salinización, que se presenta en 7 por ciento de los suelos. Todo esto hace que los terrenos pierdan nutrientes de materia orgánica y por microorganismos del suelo, así como compactación y acidificación.