Ť Garantizar a 30 millones de pobres el acceso a productos básicos, el propósito
Anuncia Sedeso red alimentaria nacional
Ť Diconsa, Liconsa y Progresa participarán en el plan Ť Será ejemplo en América Latina, afirma Vázquez Mota Ť Los programas de abasto popular no están en peligro, aclara
El gobierno federal conformará una red alimentaria nacional para garantizar el abasto de productos básicos entre 30 millones de pobres del país, anunció la titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), Josefina Vázquez Mota.
Explicó que esta estrategia tendrá presencia no sólo en zonas rurales, sino que se extenderá a los medios urbano y semiurbano, en los cuales la pobreza es un "problema muy serio".
Esa red, añadió, integrará los tres programas antipobreza más importantes del país mediante Diconsa y su cadena de 23 mil tiendas, Liconsa y el Programa de Educación, Salud y Alimentación (Progresa).
La funcionaria asistió a la clausura del quinto Congreso de Consejos Comunitarios de Abasto, encargados en las comunidades de administrar y supervisar con el personal de Diconsa el suministro de víveres a sus poblaciones.
En la reunión, los asistentes manifestaron su preocupación por el futuro del programa de abasto para los pobres. Recordaron que con la crisis de 1999 estuvo a punto de desaparecer, incluyendo las tiendas de Diconsa, por lo que pidieron a la funcionaria su defensa.
"No necesitan defender lo que nadie pretende eliminar", respondió. Aseguró que su defensa y fortaleza están garantizadas, porque es el programa más importante y de mayor tradición en la política social.
Vázquez Mota aclaró que el plan recién anunciado carece de nombre, pero se podría denominar, en principio, programa de abasto rural y urbano.
Fue en Morelos, Zacatecas, donde anunció la formación de una alianza estratégica entre Diconsa, Liconsa y Progresa para construir la red de alimentación rural y urbana más importante del país.
Se comprometió a efectuar el mayor esfuerzo para que dicho programa se constituya en "la red nacional más importante de carácter alimentario, para que sea ejemplo para América Latina y en otros muchos países", señaló.
Explicó que en su funcionamiento, Liconsa juega "un papel fundamental" por su experiencia en materia de nutrición y abasto. En el caso de Progresa, apoyará la red de tiendas Diconsa.
El abasto de productos básicos a las zonas urbanas y semiurbanas en las que viven familias en situación de pobreza y marginación, en ocasiones más grave que la pobreza rural, estaría garantizado con ese programa.
Subrayó que las compras de productos para el sistema de abasto deben hacerse de manera preferente a los productores y fabricantes nacionales, cuidando siempre la calidad y que tengan precios competitivos en beneficio de las comunidades.
Se refirió a la transformación de las casi 23 mil tiendas rurales de unidades de servicio comunitarias con teléfono, correo, entrega de transferencias de Progresa, pago de servicios como energía eléctrica y venta de medicamentos.
A la fecha, más de 9 mil tiendas Diconsa tienen servicio de correo; 3 mil 245, teléfono; en todas se vende leche en polvo Liconsa exclusiva para Diconsa, y hay una sección de productos enriquecidos con proteínas que contribuyen a una mejor alimentación de la población rural.