VIERNES Ť 23 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Buscan vender franquicias del cártel de Tijuana, aseguran fuentes de la PGR
Los Arellano Félix, narcos en pos del retiro
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
Los hermanos Arellano Félix, líderes del cártel de Tijuana, una de las mayores organizaciones que operan desde México, "son narcotraficantes en pos del retiro", aseguraron fuentes de la Procuraduría General de la República (PGR).
Como parte de su "salida del negocio de drogas se tienen indicios que los tres dirigentes de la organización más sanguinaria y violenta se han cambiado el rostro".
Funcionarios de alto nivel de la dependencia aseguraron a La Jornada que reportes de inteligencia "elaborados por el Centro de Planeación para el Control de Drogas -Cendro- han ido obteniendo información de que ya están buscando la manera de que su organización trabaje como si se tratara de la venta de franquicias y sus zonas sean explotadas mediante el pago de derecho de piso".
Los entrevistados mencionaron que "el área de inteligencia de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra la Salud (FEADS) también ha detectado que los golpes a la estructura administrativa y operativa de la organización de los Arellano Félix han obligado a replantear su composición aunque el mando sigue estando en manos de los tres hermanos".
Benjamín, conocido como el Licenciado Sánchez o Colores, Ramón, El Gualín, y Francisco Javier, El Tigrillo, son los líderes de la organización que controla el tráfico de cocaína, mariguana y drogas sintéticas en 15 entidades: Baja California Sur, Baja California, Sonora, Chihuahua, Nuevo León, Sinaloa, Zacatecas, Nayarit, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Quintana Roo, estado de México y Distrito Federal, de acuerdo con el "Mapa delictivo de la República Mexicana" elaborado por el Cendro.
Sin embargo, indicaron, "desde hace unos meses, tras la detención de operadores de su organización, como Ismael Higuera Guerrero, El Mayel, y Jesús, El Chuy, Labra Avilés, los tres hermanos se han dedicado mayormente a evitar su captura, y han trabajado sus zonas mediante grupos locales a los cuales apoyan para que produzcan y trafiquen en sus rutas, pagando una comisión".
Los líderes del cártel de Tijuana "ya no tienen la fisonomía que conocemos por fotografías, y estamos trabajando para obtener información respecto de las cirugías que, según se sabe, se les practicó".
Las fuentes de la PGR mencionaron que la de los Arellano Félix "sigue siendo una de las más avanzadas organizaciones criminales, ya que poseen una estructura controlada por unos cuantos, como si se tratara de un consejo de administración bajo la tutela de una presidencia tripartita, aunque han sido capaces de establecer mecanismos de usufructo de sus rutas para consolidarse también como intermediarios en el tráfico de drogas.
"En distintos estados de la República los narcotraficantes locales han pactado con sus representantes -de los Arellano- para operar de manera aislada, creciendo con ello su poder local o regional, aunque siguen dependiendo de la estructura de los Arellano para colocar su mercancía, o bien que ésta les sea adquirida en zonas cercanas a la frontera para que sea su organización la que la transporte a Estados Unidos, y obtengan de allí una ganancia sin arriesgar su capital", aseguraron los informantes.
Indicaron que "uno de sus mayores logros es que han alejado de sus actividades a sus hijos, sus hermanas o familiares cercanos".
La PGR ha ofrecido 8 millones de pesos a quien proporcione información que lleve a la detención de los tres o cualquiera de ellos, en tanto que la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) ha puesto como recompensa por la captura de Ramón Arellano Félix 50 mil dólares.
Para Washington la organización de los Arellano Félix es "uno de los más poderosos, violentos y agresivos grupos traficantes de drogas que operan desde México", se les considera responsables de "transportar, importar y distribuir múltiples cantidades de heroína, metanfetaminas, mariguana y cocaína".