SABADO Ť 10 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Espera que el Tricolor logre su boleto, como Ecuador

Ojalá la clasificación sea un aliciente para salir de la crisis, opina Aguinaga

MIGUEL ANGEL RAMIREZ

La clasificación de la selección ecuatoriana al Mundial 2002 de Corea del Sur y Japón "ayuda muchísimo" al país, consideró ayer Alex Aguinaga. "Ojalá este aliciente que nosotros le dimos sirva para que la gente se motive, trabaje más y se pueda salir de la crisis."

El jugador del Necaxa retornó de Ecuador luego de disfrutar de "una fiesta increíble" por la obtención del boleto a la Copa del Mundo, por primera vez en la historia de esa nación.

Dijo que ahora es importante que México también logre el pasaporte para la justa de Japón y Corea del Sur. "Primero por el país; yo llevo aquí 12 años y me daría mucho gusto que clasificara.

"No me daría gusto enfrentarlo allá (en el Mundial), porque creo que sería una situación mala para mí; me gustaría más jugar contra otros equipos.

"Si nos tenemos que enfrentar en rondas finales qué bueno, pero al comienzo no lo deseo."

Además, la clasificación del Tricolor le ayudaría "mucho, porque tanto los calendarios" de ambas selecciones "como el mexicano van a tener que ser uno solo".

Se unificarán y debido a que se tienen que realizar partidos de preparación "sería más factible" poder cumplir con los torneos.

Aguinaga consideró que "Dios te da y te quita", pues recordó que este ha sido "el peor año" de sus 17 que tiene de carrera profesional, debido a las lesiones, pero "se corona con una clasificación al Mundial".

Aunque sólo habían visto la Copa del Mundo "por televisión", Alex no consideró que la selección ecuatoriana haya cumplido ya con su misión.

"Porque no se trataba de llegar a ese objetivo como una misión, sino como un sueño. Y uno se queda tranquilo porque la selección jugó bien y tuvo personalidad en todo momento".

Resaltó que disfruta el momento y "trata de vivir el presente", por lo que no deseaba pensar "qué va a pasar en el Mundial", aunque "son siete meses que se van en un instante".

Lo que sí tiene definido es que fue su última eliminatoria mundialista, pero no desea convertirse en técnico al colgar los botines. "Tengo el título pero no me interesa por el momento. Ahorita me preocupa más jugar y rendir."

Pese a que su federación le había "exigido que jugara el último partido de la eliminatoria, porque sería una falta de respeto para Chile enfrentarlo con un equipo de menor calidad", llegó a un acuerdo con los dirigentes para regresar con el Necaxa.

"Estamos en la recta final también y no puedes dejarla pasar; son oportunidades que Dios te da y tienes que tomarlas", explicó Aguinaga.