SABADO Ť 10 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Estoy seguro que clasificaremos, expresó el técnico Maradiaga
Los hondureños quieren dar el Aztecazo
AFP Y DPA
Tegucigalpa. 9 de noviembre. Al concluir su preparación, el representativo hondureño espera imitar el Maracanazo de Uruguay a Brasil con un Aztecazo el domingo ante México.
"Vamos a la guerra", "no hay mañana" y "vivir o morir" gritaron este viernes los seleccionados hondureños, al tiempo que, entre bromas, se pintaban la cara con lodo como soldados en la cancha de entrenamiento.
La única novedad en el campamento catracho es que fue llamado de urgencia el portero Junior Morales, ya que el titular, Noel Valladares, no se ha recuperado de su lesión.
El resto de los jugadores se encuentra listo y sólo Danilo Turcios, David Suazo y Julio César León realizan trabajo especial, pero sin peligro de perderse el partido.
El técnico Ramón Primitivo Maradiaga dijo que en el plantel reinan el optimismo y la motivación. Indicó que su equipo jugará a la ofensiva y pensando sólo en la victoria.
Aseguró que no se le ha olvidado la apuesta que tiene con El Vasco Aguirre y que "le saldrá cara la comida, porque estoy seguro de que clasificamos".
En tono jocoso, comentó que aún tiene tiempo para pensar dónde será la comida fuera de Honduras; "será en otro país y en un sitio caro, porque a mí me gusta comer bien".
Antes de partir rumbo a la capital y a la visita a la Virgen de Suyapa, el presidente de la nación, Carlos Flores Facussé ,estuvo con los jugadores y les pidió que "dejen el alma y el corazón en el estadio".
En la calle, 50.6 por ciento de los aficionados creen que su selección dará el Aztecazo al conjunto mexicano.
El árbitro guatemalteco Carlos Batres, encargado de pitar el partido del domingo, afirmó que espera no tener problemas.
"He silbado partidos a los dos equipos y no encuentro mayor complicación; sé que es un juego crucial y quien gane estará en el Mundial, pero yo también quiero estar ahí y por eso debo poner todo lo que esté a mi alcance", dijo Batres antes de partir de su país a México.
Aunque admitió que no ha dirigido partidos con gran número de aficionados, el nazareno se mostró tranquilo: "El Azteca es un estadio como cualquier otro, la única diferencia es que estarán más de 120 mil aficionados, pero los árbitros profesionales estamos preparados".