SABADO Ť 10 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Atesorado, 48% del gasto
Priístas advierten que no permitirán subejercicios
RENATO DAVALOS Y ENRIQUE MENDEZ
Legisladores priístas anticiparon que su partido buscará en el Congreso "endurecer las reglas" para que el gobierno foxista no disfrace subejercicios en el presupuesto de 2002. Los recursos que se han atesorado alcanzan 48 por ciento del gasto de las dependencias, señalaron.
En el próximo presupuesto, advirtió el diputado priísta David Penchyna, pugnaremos porque se establezcan reglas claras para el cumplimiento del ejercicio del gasto. No entendemos cómo se recurre a un tercer recorte en el presupuesto gubernamental y se amenaza con un cuarto, cuando hay un subejercicio promedio de 48 por ciento hasta septiembre, según el reporte trimestral de las finanzas públicas de la Secretaría de Hacienda.
En la sede nacional priísta, Penchyna y el senador Miguel Angel Navarro establecieron que el grupo legislativo del tricolor no le aprobará al presidente Vicente Fox su propuesta de reforma fiscal. Sacar adelante la iniciativa presidencial no depende del Ejecutivo. El debe hacerse responsable de su trabajo y respetar, añadieron.
También censuraron la encuesta que dio a conocer la Coparmex: se trata de una evaluación que tiene la seriedad reflejada en que fueron calificados "diputados muertos".
Hemos visto diferentes expresiones del Ejecutivo que nos pueden llevar a pensar que esa probable campaña de desprestigio contra el Legislativo parte de ahí, dijo Penchyna. Ojalá que pronto el presidente Fox "haga un deslinde", porque se han observado varias actitudes desde ese poder de la Unión, incluidos varios miembros del gabinete, que "hemos intuido nosotros y ustedes", señaló en relación con los medios de comunicación.
El hecho de que el sondeo de la Coparmex haya señalado que las percepciones se modificarían de acuerdo a como concluya la discusión de la reforma fiscal y los términos en que se apruebe el Presupuesto de Egresos, es un "claro chantaje y presión" para defender los intereses de los empresarios.
Lamentaríamos mucho que detrás de esa campaña de desprestigio contra el Legislativo emprendida hace unos días estuviera el Presidente de la República, indicó Penchyna.
El del jueves, precisó Penchyna, apareció como un "mitin de muy baja calidad profesional y con un sustento técnico escaso, por no decir nulo". El Poder Legislativo no es culpable ni del atorón ni de la marcha accidentada en los primeros meses del gobierno foxista; por el contrario, los legisladores han aprobado 86 por ciento de las iniciativas que ha remitido el Ejecutivo.
No queremos aprobar la reforma fiscal en sus actuales términos, y no es un capricho, apuntó el legislador priísta. En una época recesiva gravar los alimentos y las medicinas significa profundizar ese proceso económico.
Para nosotros no se trata de una reforma estructural, sino de un simple aumento de impuestos. Además, en esos nuevos gravámenes no están de acuerdo 46 legisladores de Acción Nacional. Ello revela que no hubo una estrategia gubernamental a la hora de la presentación de la iniciativa.