VIERNES Ť 9 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Cambia la óptica occidental en aeronáutica


La guerra al terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos cambió la óptica de los occidentales, que ahora se interesan más en los sistemas de captación de información, según industriales del salón de Aeronáutica de Dubai.

Signo de los nuevos tiempos: ningún contrato de aviones de combate fue anunciado en este Salón, que terminó este jueves.

Varios cazas fueron exhibidos, entre ellos un F-15 Eagle, un F-16 Fighting Falcon, un F-18 Hornety, un Mirage 2000 y un Sukhoi 30.

Wolfram Wolf, director de información de aviones militares del gigante europeo de la defensa EADS, recuerda que antes del 11 de septiembre las fuerzas armadas se preparaban para combatir a otras fuerzas armadas y que las reglas de combate eran bien conocidas.

Ahora, agrega, todos los escenarios son posibles y ninguno es conocido por anticipado.

La defensa -asegura- debe ser considerada con más amplitud: más allá de tanques y aviones hay que contar con un sistema integrado que comprenda, entre otras cosas, satélites de informaciones, aviones de reconocimiento y helicópteros policiales.

Incluso si la necesidad de aviones de combate es inferior, los industriales tienen mucho que ofrecer para la nueva guerra, sostiene Yves Robins, director de relaciones internacionales de Dassault: aviones sin piloto, aviones de reconocimiento, helicópteros y satélites para escuchar, vigilar y fotografiar de día y de noche.

Dassault, como el brasileño Embraer, pueden proponer reconvertir sus aviones para hombres de negocios en aparatos de reconocimiento.

Boeing ha constatado un interés creciente por los aviones de vigilancia, asegura Bob Saling, del departamento de comunicaciones de esta firma productora de los famosos aviones-radar AWACS.

La guerra de Afganistán tiene un potencial de crecimiento para los aviones de transporte y de abastecimiento en vuelo para los satélites de información, según Saling.

Agrega que el gobierno estadunidense podría querer mejorar su capacidad de transporte de tropas y material y también querer recibir más informaciones por satélite para ubicar las zonas de concentración de los terroristas, lo que podría llevarle a contratar la fabricación de un satélite de reconocimiento.

AFP