VIERNES Ť 9 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

La mujer en el mundo talibán


Tashkent, 8 de noviembre. De acuerdo con un documento preparado por la Asociación Revolucionaria de Mujeres de Afganistán (RAWA, por sus siglas en inglés), organización proscrita y que opera fundamentalmente en el exilio, los talibanes tratan a sus mujeres peor que a sus animales.

Estas son algunas de las restricciones impuestas por el régimen talibán a las afganas, según la denuncia de la RAWA:

Ť Total prohibición del trabajo femenino fuera de sus hogares.

Ť Completa prohibición de cualquier tipo de actividad de las mujeres fuera de casa, a no ser que sean acompañadas de su mahram (pariente cercano como padre, hermano o marido).

Ť Prohibición de cerrar tratos con comerciantes hombres.

Ť Prohibición a ser atendidas por médicos hombres.

Ť Prohibición de estudiar en escuelas, universidades o cualquier otra institución educativa.

Ť Exigencia de llevar un largo velo (burka), que las cubre de la cabeza a los pies.

Ť Azotes, palizas y agresiones verbales contra las mujeres que no vistan acorde con las reglas talibán o contra las que salgan a la calle sin su mahram.

Ť Azotes en público a las mujeres que no oculten sus tobillos.

Ť Lapidación pública a mujeres acusadas de mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio.

Ť Prohibición de usar cosméticos (a muchas mujeres con las uñas pintadas les fueron amputados los dedos).

Ť Prohibición a las mujeres de hablar o estrechar las manos a hombres que no sean su mahram.

Ť Prohibición a las mujeres de reír (ningún extraño debe oír la voz de una mujer).

Ť Prohibición de llevar zapatos con tacones, que pueden producir sonido al caminar (un hombre no debe oír los pasos de una mujer).

Ť Prohibición de tomar un taxi sin su mahram.

Ť Prohibición de tener presencia en la radio, la televisión o reuniones públicas de cualquier tipo.

Ť Prohibición de practicar deportes o entrar en cualquier centro o club deportivo.

Ť Prohibición de montar en bicicleta o motocicleta, aunque sea con sus mahrams.

Ť Prohibición de llevar burkas de colores vistosos.

Ť Prohibición de reunirse con motivo de fiestas o con propósitos recreativos.

Ť Prohibición de lavar ropa en los ríos o lugares públicos.

Ť Modificación de toda la nomenclatura de calles y plazas que incluyan la palabra "mujer".

Ť Prohibición a las mujeres de asomarse a los balcones o ventanas de sus casas.

Ť Opacidad obligatoria en todas las ventanas, para que las mujeres no puedan ser vistas desde fuera de sus hogares.

Ť Prohibición a los sastres de tomar medidas a las mujeres y coser ropa femenina.

Ť Prohibición del acceso de las mujeres a los baños públicos.

Ť Prohibición de usar pantalones acampanados, aunque se lleven debajo de la burka.

Ť Prohibición de fotografiar o filmar a mujeres.

Ť Prohibición de imágenes de mujeres impresas en revistas y libros, o colgadas en los muros de casas y tiendas.

Todo esto, sin contar con las restricciones que los talibanes imponen a los hombres.

JUAN PABLO DUCH, ENVIADO