JUEVES Ť 8 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Los celos, móvil aparente; el homicida sobrevivió, aunque con muerte cerebral

Integrante de la Policía Montada asesinó a su esposa y sus tres hijas; luego intentó suicidarse

SUSANA GONZALEZ G.

policia_asesinato_m7yLuego de asesinar a su mujer con un balazo en la cabeza afuera de su domicilio y herir a una sobrina de doce años en la pierna derecha, un integrante del Agrupamiento a Caballo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Emanuelle Israel Chávez Díaz, se atrincheró en su departamento con sus tres hijas y al llegar la policía, las mató y se dio un tiro en la cabeza.

Todo ocurrió ayer por la mañana en la colonia Presidentes, delegación Alvaro Obregón, cuando la esposa del policía, Cecilia Margarita López Pérez, de 22 años de edad, se presentó con las cuatro niñas en el departamento 5 de Valentín Gómez Farías 16, donde vivió con él hasta el mes pasado.

Según versiones de vecinos, la unión creada entre Israel y Cecilia hace más de ocho años al nacer su primera hija, cuando ambos eran adolescentes, se rompió cuando la mujer comenzó a salir con un mecánico de la colonia.

"Israel se enteró hace como mes y medio, cuando el amante de Cecilia llamó a la casa y entonces se pelearon. El le pegó y Cecilia se fue de la casa con las niñas, pero parece que hoy regresó a recoger todas sus cosas", dijo Nancy, una joven que vive en el mismo edificio donde ocurrió la tragedia y aseguró haber sido amiga de la pareja.

Cecilia fue a vivir con su abuela, dos tías y su sobrina Lourdes Martínez López a una casa de lámina ubicada un par de calles adelante, y cada noche salía a vender papas fritas en un puesto que su familia instaló hace varios años en la avenida principal de la colonia.

Israel, de 25 años, quien en julio de 1999 ingresó a la policía capitalina, se quedó a vivir en el departamento donde también habita su mamá. Según sus vecinos, "cuando no estaba de servicio como policía trabajaba como chofer de microbús, pues a eso se dedicaba antes".

Ayer, antes de las diez de la mañana, Cecilia acudió al departamento con sus hijas Paola Margarita, Giovana y María Fernanda, de 4, 5 y 8 años de edad, respectivamente, y con su sobrina Lourdes, pero se encontró con Israel, quien estaba en su día franco. La pareja comenzó a discutir y el policía buscó su arma, un rifle R-15, para amenazar a Cecilia, quien al parecer salió huyendo del edificio.

De nada le sirvió. Su marido le dio alcance y le disparó un tiro en la cabeza que la hizo desplomarse boca arriba, ensangrentadas la cara y la blusa blanca que vestía, a menos de veinte metros de su antigua casa. Israel le dipolicia_asesinato_m7gesparó también a Lourdes, pero en la pierna derecha, y luego entró de nuevo al edificio.

Al menos un par de vecinas se asomaron entonces por las escaleras para saber qué ocurría y al verlo empuñando el rifle, una trató de tranquilizarlo y le pidió dejar el arma.

El policía no estaba seguro de si había matado a su mujer porque pidió a una de las mujeres asomarse a la calle: "Vea a Ceci. Me puso los cuernos. Dígale que no venga ningún policía porque los mato", y entonces volvió al primer piso para encerrarse en su departamento, donde el cristal de la puerta ya estaba roto.

La policía llegó cuando "las niñas todavía estaban llorando, pero entonces se oyeron disparos y luego silencio". Otra versión cuentan los policías sectoriales, primeros en arribar al lugar en las patrullas 39027 y 39029: "primero vimos a la mujer tirada en la calle, ya muerta, y luego de preguntar a la gente qué había pasado nos metimos al edificio y empezamos a gritarle al compañero por su nombre, pero nunca contestó y tampoco oímos los disparos. Ya había pasado todo".

Uniformados y paramédicos de la Cruz Roja pudieron entrar cuando uno metió la mano por el cristal roto. "Todos los cuerpos estaban en la recámara, cada uno con un disparo en la cabeza. La niña mayor tendida a la orilla de una cama matrimonial y las otras dos sobre el suelo, a un lado de su padre, que estaba cerca de la entrada del cuarto."

Paola, la primogénita, aún presentaba signos de vida al ser examinada por paramédicos pero murió minutos después, según testimonio de un policía. En cambio, Israel sobrevivió a su intento de suicidio. El disparo que guardó para sí no fue tan certero como aquellos con los que mató a toda su familia, y permanece internado en la Cruz Roja en Polanco, aunque su estado de salud es delicado e incluso trascendió que tiene muerte cerebral.