JUEVES Ť 8 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Acusan a Litho Formas de pagar mordida por imprimir boletas electorales
No responde el IEE de Puebla citatorios para aclarar un presunto soborno de $7 millones
Ť Manuel Abascal, quien descubrió el delito, fue despedido de la empresa editorial
LA JORNADA DE ORIENTE
Puebla. Pue., 7 de noviembre. El Instituto Estatal Electoral (IEE) no ha respondido a dos citatorios de la procuraduría de Justicia para que aporte elementos que sirvan para la investigación que realiza por un presunto soborno de 7 millones de pesos que hubo en favor de Enrique Castañeda Espinoza de los Monteros, quien hace tres años, en su calidad de director administrativo de la ahora extinta Comisión Estatal Electoral (CEE), otorgara a la empresa Litho Formas la impresión de 4.5 millones de boletas electorales.
Incluso se giró un tercer citatorio, pero por un error del agente del Ministerio Público el documento fue entregado en las oficinas del Instituto Federal Electoral y no en las del IEE, informó Francisco Manuel Abascal Sherwell, quien descubrió el soborno y por ello fue despedido de la empresa Litho Formas, que tiene su sede en la ciudad de México.
Un hecho que destaca es que el IEE gastó recientemente 3 millones 160 mil pesos en la impresión de más de 5 millones de boletas que serán utilizadas en los comicios del próximo domingo. Estas papeletas por primera vez llevarán la fotografía de los candidatos a diputados locales y alcaldes, así como varios candados de seguridad.
En cambio, la extinta CEE, hace tres años, informó oficialmente que erogó el doble, 6 millones 250 mil 156 pesos, en la impresión de menos boletas, 4.5 millones, que no llevaban fotografía. Entonces las papeletas se emplearon para la elección de gobernador, alcaldes y diputados.
Abascal Sherwell asegura que el gasto real que hizo la CEE por las boletas fue de 9 millones 976 mil 592 pesos, cifra que sirvió para que Litho Formas pagara una mordida a funcionarios de la CEE.
Cabe señalar que la CEE desapareció a finales del año pasado al crearse el IEE.
Francisco Manuel Abascal Sherwell mostró el oficio, con sellos de recibido del IEE del 30 de abril de este año, por medio del cual, invocando el artículo 8 de la Constitución, solicita al instituto que le proporcione la factura que la CEE le expidió a Litho Formas, para que se aclare cuál fue el monto exacto que se pagó por las boletas electorales. El organismo no ha respondido a su petición.
La misma información la pidió la PGJ, pero de igual forma, el IEE no ha respondido, aseguró Abascal Sherwell.
Comentó que para defenderse del delito de cohecho del que están acusados el director de operaciones de la compañía y el subdirector general, Francisco Simón Galindo y Edmundo Ocejo González, la empresa Litho Formas contrató el bufete de Fernando Gómez Mont, el mismo que representa al ex banquero Carlos Cabal Peniche.
La historia del supuesto soborno, de acuerdo con la denuncia que Francisco Manuel Abascal Sherwell presentó en la PGJ, es la siguiente:
El demandante era agente comercial de Litho Formas. El 7 de septiembre de 1998 firmó un contrato con Sergio Reguero Placeres, quien era el presidente de la CEE, para que se imprimieran 4.5 millones de boletas por un monto de 6 millones 250 mil 156 pesos. Abascal Sherwell tenía un convenio con su empresa de obtener una comisión de 20.7 por ciento por cada contrato que signara.
El mencionado contrato sufrió modificaciones durante la elaboración de las boletas y finalmente se acordó que el costo total de las papeletas era de 9 millones 976 mil 592 pesos.
Meses después, cuando Abascal Sherwell tuvo conocimiento de que la CEE ya había liquidado el pago de las boletas, solicitó su comisión, a lo que un directivo de la empresa, Edmundo Ocejo González, le respondió que se le pagaría únicamente el equivalente a una venta de dos millones de pesos, ya que el resto, es decir 7 millones de pesos, se habían pagado como mordida a Enrique Castañeda Espinoza de los Monteros.
Otro directivo de Litho Formas, Francisco Simón Galindo, no sólo confirmó lo del soborno, sino le relató que el dinero fue entregado al funcionario electoral en el aeropuerto de la ciudad de México.