Ť El canto que espanta la pena, del rocanrol al heavy
La Verbena Popular reúne alegría y experiencia en su nueva producción
JORGE CABALLERO
Hay todo tipo de nombres de bandas de rock: insinuantes, húmedos (Kiss, Genitalica, Sex Pistols), esotéricos (Black Sabbath, Brujería, Cabrito Vudú) o los que sirven de grito de guerra (Jaguares, Metallica, Los Lobos); también los hay enigmáticos (Red Hot Chili Peppers, Zurdok, La Gusana Ciega) y, por supuesto, aburridos (mejor no los mencionamos... pero ellos saben quiénes son).
Pocas veces, sin embargo, el apelativo de un grupo es también la descripción atinada de su música y la definición exacta de su personalidad. La Verbena Popular cumple con los requisitos para inscribirse en esta categoría, pues el ambiente que generan sus canciones, de abundantes colores, ritmos bullangueros y melodías guapachecas, corresponde sin duda al de una fiesta en la calle, en el pueblo, en el barrio, en el patio, en la colonia; eso es una verbena popular y así es La Verbena Popular.
El canto que espanta la pena es el nuevo álbum del sexteto, integrado por los regiomontanos Meli (guitarra y voz), Juan Carlos (voz y guitarra), Fede (batería), Fery (bajo), Pekas (percusiones) y McFly (guitarra), producido por Flavio Cianciarullo, bajista de los Fabulosos Cadillacs. La producción muestra a una banda que combina la experiencia adquirida en cientos de actuaciones en vivo, con la enjundia que sólo las hormonas de su alegre juventud pueden ofrecer.
En las 12 canciones del álbum (más un pilón), queda claro que en este caso el término "rock" adquiere una elasticidad tremenda, porque los ingredientes que aparecen aquí y allá pertenecen a diversos géneros, estilos y regiones geográficas: en El canto que espanta la pena de repente se escuchan un tresillo cubano o un bajo sexto norteño, un ritmo brasileiro, una polka punk, un raggamuffin, así como también sorprende, en cierto momento, un pasaje de rocanrol o de heavy metal... ¡de todo se vale!
Para obtener mayores detalles, favor de escuchar piezas como El clásico muchacho, Almada, Miel de estrella, Canción en el camión, Encharcados, La balada del Lacabo o cualquiera de las que vienen en el nuevo disco de La Verbena Popular.
Con menos de dos años de existencia, La Verbena Popular se ha ganado a pulso el reconocimiento de sus colegas y el cariño del público. El canto que espanta la pena, con Báilamela como primer sencillo promocional, habrá de ser otro paso gigante en la vertiginosa carrera de la banda más prometedora de Monterrey.
El canto que espanta la pena cuenta con la participación de varios músicos invitados, entre ellos Cano, guitarrista y cantante de El Gran Silencio, Flavio Cianciarullo y Javier Ríos, acordeonista de los Invasores de Nuevo León.