Ť Hamas y Jihad se atribuyen la responsabilidad del ataque, condenado por Arafat
Atenta un palestino contra autobús en Jerusalén; mueren dos israelíes y hay decenas de heridos
REUTERS, AFP Y DPA
Jerusalen, 4 de noviembre. Un presunto extremista palestino abrió fuego este domingo contra un autobús en el norte de Jerusalén provocando dos muertos y 50 heridos, horas después que el gobierno de Israel anunciara la segunda fase de la retirada de sus tropas de la ciudad cisjordana de Kalkiliya, que comenzó esta noche.
Trascendió que luego del atentado, que ocurrió en el barrio de colonización de French Hills, al este de Jerusalén, soldados israelíes abrieron fuego y mataron al atacante, que no ha sido identificado.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó el atentado, el cual fue reivindicado tanto por el movimiento Jihad como por Hamas. Pero al mismo tiempo, la dirección palestina responsabilizó en su comunicado a Israel del deterioro de la situación en el plano de la seguridad, debido a la ocupación de zonas autónomas palestinas y de sus política se asesinatos selectivos de presuntos extremistas palestinos.
La ANP solicitó nuevamente una resolución del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas para exigir la retirada de las fuerzas israelíes de las zonas autónomas y el levantamiento del bloqueo impuesto, pero al mismo tiempo reiteró su disposición a acoger cualquier iniciativa internacional encaminada a calmar la situación y a aplicar las recomendaciones del informe Mitchell.
Horas antes del atentado, el ministro israelí de Defensa, Benjamin Ben Eliezer, anunció que Israel retirará sus tropas de una de las cinco ciudades ocupadas, Kalkiliya, en el norte de Cisjordania, y se declaró favorable a una retirada de las otras cuatro ciudades: Ramallah, Nablus, Tulkarem y Jenin, ocupadas el 18 de octubre tras el asesinato del ministro israelí de Turismo, Rehavan Zeevi, un día antes.
Ben Eliezer y el primer ministro Ariel Sharon concluyeron que las incursiones habían cumplido su objetivo y podían terminar, según el vocero del Ministerio de Defensa, Yarden Vatikay. Previamente, el canciller Shimon Peres había anunciado que el ejército estaba planeando una retirada de Kalkiliya, ciudad por ciudad.
Tras el atentado, un responsable del Ministerio de Defensa israelí que pidió el anonimato, aseguró que a pesar del incidente armado, que calificó de "suceso aislado", Israel retirará a su ejército este domingo, y por la noche se constató que tanques y tropas israelíes comenzaron el repliegue.
"Las fuerzas israelíes comenzaron a retirarse", declaró un portavoz castrense, quien dijo que la operación durará varias horas. En cuanto comenzó la retirada, agentes de seguridad palestinos empezaron a tomar posiciones.
No obstante, tras el ataque, el ejército intensificó su bloqueo alrededor de Ramallah, ya reforzado la víspera. Además, por la mañana de este domingo, el ejército israelí destruyó dos talleres y dos fábricas de la ciudad de Jabaliya, en la Franja de Gaza, al asegurar que se trataba de centros de fabricación de morteros y bazucas.
Helicópteros dispararon esta madrugada cinco misiles sobre las fábricas y los talleres, pero en la acción también fueron destruidos pequeños talleres privados. Para Hicham Iwaini, presidente del Sindicato de Industrias Madereras, "el objetivo de los israelíes es destruir todas las fábricas de Gaza porque no quieren que seamos productores, sino compradores".