No hay contaminación por ántrax en Alemania, revelan análisis; en NY confirman tercer caso
Ť Rechaza Rusia conexión con esporas de la bacteria y asegura no poseer armas biológicas
REUTERS, AFP Y DPA
Berlin, 2 de noviembre. Análisis practicados por el Instituto de Biología berlinés Robert Koch demostraron que los sobres con polvo blanco recibidos en dos regiones de Alemania no contenían la bacteria del ántrax, pero en Estados Unidos se confirmó que una persona que trabaja en el diario The New York Post resultó infectada con la bacteria.
En Moscú, funcionarios de alto nivel de la Defensa y el Ministerio de Salud negaron categóricamente que las esporas de ántrax encontradas en Estados Unidos pudieran haberse originado en Rusia. "Estoy seguro de que se prepararon en territorio estadunidense", dijo Genady Onishchenkjo, viceministro de Salud.
Viktor Jalstov, jefe de las divisiones química, radiactiva y biológica del Ministerio de Defensa, rechazó, por su parte, que Rusia posea armas biológicas. "Nunca las desarrolló ni las almacenó", aseguró.
Los funcionarios salieron al paso de lo que calificaron de intentos occidentales para hallar una conexión rusa a las esporas de ántrax, toda vez que la ex Unión Soviética tuvo el más extenso programa de armas biológicas del mundo, y aunque firmó la convención de 1972 que prohibió tales armas, continuó trabajando en ese campos por lo menos hasta finales de 1980.
En Washington, el director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), Robert Mueller, admitió la posibilidad de que los ataques bioterroristas tengan origen en Estados Unidos, pero precisó que las autoridades no descartan ninguna pista por el momento.
Washington y el bacilo
"Es posible que haya alguien en Estados Unidos que produzca el bacilo", dijo Mueller tras hacer un llamado al público a fin de que ayude a hacer progresar las investigaciones de los atentados del 11 de septiembre y el envío de cartas contaminadas.
Las autoridades estadunidenses siguen más de mil pistas en busca de los responsables de un brote de ántrax, "entre las que se incluyen más de 100 que nos han llevado al extranjero", dijo Mueller.
El presidente del Instituto Robert Koch, de Berlín, Reinhardt Kuhnt, explicó que las muestras analizadas tenían rastros de bacterias que parecían de carbunco pero que se tiene seguridad de 98 por ciento de que no se trata de ese bacilo.
Análisis practicados anteriormente dieron positivo y se temía que Alemania fuera el siguiente país víctima de un ataque con ántrax.
En la región de Turingia, una carta que llegó el 25 de octubre a la oficina de empleo de la ciudad de Rudolstadt despertó las sospechas de los encargados de repartir el correo, pues parecía contener polvo y su remitente era paquistaní.
En la ciudad de Neumuenster, en la región de Schleswig-Holstein, fueron encontrados otros dos paquetes sospechosos, pero un hombre que se presentó a la comisaría local dijo que envió 30 paquetes a destinatarios de esa localidad, aunque aseguró no saber nada de la presencia de polvo blanco.
Pero autoridades paquistaníes revelaron que se encontraron esporas del bacilo en tres lugares diferentes -un banco, un periódico y una compañía informática- pero nadie resultó afectado, declaró en Islamabad el ministro de Ciencia y Tecnología, Attur Rehman.
También en Nueva York, las autoridades de salud confirmaron un tercer caso de ántrax. Se trata de una mujer que trabaja en la redacción del periódico The New York Post, quien ya está en vías de recuperación.
De esta forma suman 17 los casos de ántrax confirmados en Estados Unidos, tres de ellos en Nueva York.
A las oficinas de esta publicación llegó una carta con la bacteria, de varias que fueron enviadas a distintos medios de prensa del país.
Las autoridades estiman que la mujer, al igual que los otros dos empleados afectados dentro del rotativo, tuvo contacto con el sobre contaminado.
También se informó que una carta llena de polvo blanco fue enviada al gobernador de Florida, Jeb Bush, hermano del presidente George W. Bush, pero se reveló como una broma de mal gusto.
Sin embargo, sustancias sospechosas encontradas en un saco de correos de la embajada de Estados Unidos en Atenas, fueron enviadas a un laboratorio alemán para ser analizada, y se hallaron indicios de una bacteria no identificada que podría ser ántrax, dijo el Departamento de Estado.
En Montevideo, entre tanto, los primeros exámenes a una carta que fue recibida en la embajada de Estados Unidos en Uruguay, procedente de México, descartaron la contaminación con la bacteria del ántrax, dijo un portavoz de la sede diplomática