JUEVES Ť Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť De ser así, quedará en promesas y difícilmente se cumplirán los buenos deseos, dice

A Hacienda no parece interesarle el Programa de Ciencia y Tecnología, señala René Drucker

Ť Preocupante, que en la presentación del proyecto no asistiera nadie de esa dependencia, expresa

KARINA AVILES

El coordinador del subsistema de Investigación Científica de la UNAM, René Drucker Colín, calificó de ''excelente en términos de intenciones'' el Programa de Ciencia y Tecnología 2001-2006. Sin embargo, dijo, ''a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público no parece interesarle y, de ser así, van a ser puras promesas y será difícil que se cumplan los buenos deseos'', porque dicha dependencia juega un papel fundamental para que se otorguen los apoyos al sector. La ciencia, destacó, ''no es un asunto gremial, sino de seguridad nacional''.

Al hacer un análisis del Programa de Ciencia y Tecnología, dado a conocer el pasado martes por el titular del Conacyt, Jaime Parada, el también presidente de la Academia Mexicana de Ciencias dijo que le causó ''una enorme sorpresa e inquietud el que no estuviera nadie de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en la presentación del proyecto, cuando sí estaban presentes todos los secretarios de Estado relacionados con el mismo. El titular de Hacienda (Francisco Gil Díaz) estaba ausente. No sé si es casualidad, no pudo ir o si esto es una señal ominosa'', indicó.

Drucker destacó que la ciencia y la tecnología no es cuestión de un pequeño grupo. ''La ciencia no es un asunto gremial, sino de seguridad nacional'', porque si el Estado invierte en ella tendremos un país más competitivo, fuerte y capaz de enfrentarse a la globalización en forma efectiva. Las demandas de este sector van más allá de la necesidad de un gremio y el gobierno tendrá que entenderlo, apuntó el científico. ''Da la impresión de que sí lo comprende, pero el apoyo económico está por verse.''

Actualmente, dijo, ''la pelota está en otras canchas, que son las que tienen que dar los dineros''. Una de ellas es la Cámara de Diputados, instancia que deberá asumir la responsabilidad de otorgarle mayor peso a la ciencia, así como mayor presupuesto. Y la otra es la Secretaría de Hacienda, dependencia que deberá canalizar los recursos al sector.

El académico expresó que el objetivo de procurar la inversión de los sectores productivos para estimular el desarrollo científico y tecnológico es correcto, siempre y cuando esos apoyos no sustituyan el presupuesto del Conacyt.

Sobre la política de evaluación a los científicos del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), que propone ampliar el abanico de las actividades que se calificarán dándole peso a las labores de docencia, de vinculación con el sector productivo y de difusión del conocimiento, el académico de la UNAM consideró que es ''una buena medida'', porque hará que al investigador se le evalúe en su dimensión real.

No obstante, lo anterior no excluye la evaluación de la investigación primaria, resaltó. ''Se trata de ampliar el impacto que pudiera tener el investigador o los grupos de investigadores''.

También manifestó que sería ''excelente'' ampliar el número de científicos que hay en el país. Pero para poder hacerlo no sólo se requiere generar más doctores, sino contar con la planta física y elaborar un presupuesto para acoger a los nuevos investigadores.

Drucker destacó que hay una cantidad enorme de estados que prácticamente ''no tienen nada de ciencia'' y, por lo tanto, se requiere fortalecer a las universidades públicas de las entidades y establecer toda una infraestructura para generar polos de desarrollo científico en todo el territorio nacional. ''Esto sería buenísimo para el país, porque habría un impacto en el desarrollo de la nación.''

Expresó que el actual titular del Conacyt, Jaime Parada, a diferencia de quienes lo precedieron en el cargo, ''pelea por su sector o por lo menos tiene nuevas intenciones. Es la primera vez que un director se levanta y empuja para que se le otorgue mayor presupuesto'' a la ciencia y a la tecnología.