MARTES Ť 30 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Testimonios

Con Diego se aprendía a pintar y a vivir

MERRY MAC MASTERS

''Trabajar con Diego -afirma Rina Lazo- era no sólo aprender a pintar... era también aprender a vivir''. Para Arturo García Bustos ''ue una oportunidad, como quien pudiera decir, estuve al lado de Miguel Angel, de Leonardo; así era de increíble la sabiduría que tenía el maestro.''

''Para mí -expresa Jesús Alvarez Amaya- fue un hecho definitivo, excepcional... La forma como resolvía los problemas plásticos sobre la marcha, con facilidad increíble para dibujar, para trabajar.''

''Significó mi preocupación por las cosas sociales -asevera Antonio Ramírez-, por lo humano, el respeto por las comunidades indígenas, por el trabajador''. Ramón Sánchez afirma haber aprendido del maestro ''que uno es realmente el verdadero comunicador de los grandes acontecimientos de la historia.''

Estos son algunos testimonios que Eduardo Espinosa recoge en el texto Artistas ayudantes en la obra mural de Diego Rivera, que integra el catálogo de la exposición Entre andamios y muros...

Jean Charlot escribió: ''Rivera era un trabajador incansable; podía sentarse en su andamio durante 15 horas seguidas hasta el agotamiento total. Temiendo la caída de su pesado cuerpo, lo llevábamos a uno de los asientos del anfiteatro, desde donde nos podía guiar verbalmente hasta muy avanzada la madrugada''.

Después de trabajar con Rivera -dice Espinosa-, algunos de los artistas ayudantes lo siguieron frecuentando. En la casa de Oscar Frías, ayudante en el mosaico del Estadio de CU, hubo reuniones del Partido Comunista, a las que asistían Rivera, Siqueiros y Rina Lazo, entre otros.