Coquito o itayata (Pseudobombax ellipticum), árbol que adorna atrios y solares de las comunidades oaxaqueñas Riesgo ambiental por la presencia
Ignacio Castillo Escalante Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, el 80 por ciento de las enfermedades infecciosas y parasitarias gastrointestinales y una tercera parte de las defunciones causadas por éstas se deben al uso y consumo de agua insalubre. También reconoce la OMS que sólo 41 por ciento de la población mundial consume agua tratada y desinfectada como para ser considerada "segura". En los países donde las enfermedades microbianas y las parasitarias muestran elevados índices de prevalencia, la importancia primaria de la calidad del agua para uso y consumo humano está centrada en las características microbiológicas. Se considera que la contaminación química, al no estar asociada con efectos inmediatos y agudos, tiene una importancia secundaria. Si bien es cierto que el riesgo sanitario por la presencia en el agua de sustancias potencialmente dañinas es distinto al que deriva de los contaminantes microbiológicos, no por ello es de menor importancia sanitaria pues la ingestión continua de sustancias con efectos adversos sobre la salud puede provocar daños irreparables y enfermedades crónicas en la población expuesta. Por lo anterior es prioritario para México analizar y evaluar el riesgo a la salud del niño por exposición, a través del agua, al arsénico y a los fluoruros que de manera natural se encuentran en los acuíferos de varios estados de la República. Es necesario reconocer y darle la dimensión adecuada a una situación que está presente en varias regiones del país en donde más del 80 por ciento del agua de abastecimiento para uso y consumo humano proviene de fuentes subterráneas, las principales de ellas precisamente contaminadas con estos elementos. Por todo ello se trabaja en identificar y contrastar los métodos para solucionar los problemas relacionados con esta condición natural. Además, se propone revisar y valorar las políticas y estrategias que permitan la mejor protección de las poblaciones afectadas, con atención especial en los niños. Mayor información sobre estos estudios se obtienen con el ingeniero Ignacio Castillo Escalante, gerente de Saneamiento y Calidad del Agua de la Comisión Nacional del Agua. |