MEXICO S.A.

Carlos Fernández-Vega

UN MISTERIOSO GRUPO 21, conformado por 23 "empresarios mexicanos comprometidos con México", surgió públicamente de la noche a la mañana para "felicitar al gobierno del presidente Fox por haber tomado la decisión de desarrollar el nuevo aeropuerto internacional de la capital del país".

MUCHOS DE ELLOS CON la estrellita del Fobaproa en la frente, "los abajo firmantes" del Grupo 21, "nombre bajo el cual nos reunimos con frecuencia para reflexionar sobre los asuntos en que podemos sumar de manera positiva al desarrollo del país", publicaron un desplegado -a la vieja usanza tricolor- en el que señalan que la nueva terminal aérea es una "infraestructura que consideramos indispensable para avanzar en la competitividad de los productos y servicios mexicanos, creando además una importante fuente generadora de empleos, así como grandes beneficios para todo el pueblo de México".

FROTANDOSE LAS MANOS en espera de clavarle el diente al nuevo negocio, las 23 joyas asociadas en Grupo 21 son: Adrián Aguirre Gómez, Miguel Alemán Magnani, Antonio Ariza Alducin, Xavier Autrey Maza, Jorge Ballesteros Franco, Ari Becker Feldman, Luis Berrondo Avalos, Carlos Bustamante Anchondo, Antonio Chedraui Obeso, Henry Davis Signoret, Enrique de Alba Barragán, Alonso de Garay Gutiérrez, Rómulo Farrero Escudero, Juan Diego Gutiérrez Cortina, Angel Losada Moreno, Ricardo Marcos Touche, Eduardo Martínez Urquidi, Francisco Medina Chávez, José Luis Ponce García, Daniel Servitje Montull, Luis Alejandro Soberón Kuri, Joaquín Vargas Guajardo y Olegario Vázquez Aldir.

MUCHOS DE LOS EMPRESARIOS citados tienen en común no sólo el beneficio del Fobaproa, sino haber sido accionistas del Grupo Financiero Banamex-Accival hasta su venta al Citigroup -el negocio del siglo, libre de impuestos- y socios, en distintos business, de Claudio X. González Laporte, él mismo accionista de ese consorcio financiero, ex asesor de Carlos Salinas de Gortari en materia de inversiones extranjeras y actual presidente del Consejo Coordinador Empresarial. Probablemente también tengan en común ser propietarios de algunos terrenitos en Texcoco, casualmente localizados en el área en la que se construirá el nuevo aeropuerto, pero desde luego no en la zona ejidal en la que el gobierno del cambio pretende pagar a 6 pesotes el metro cuadrado. Todo indica, pues, que, piloteados por Don Claudio, parte de los dineros obtenidos por la venta de Banamex ya encontró un nuevo nicho de negocios, con la bendición presidencial.

SIN LUGAR A DUDAS, un eminente empresario que destaca en el desplegado de Grupo 21 es Jorge Ballesteros Franco, ex presidente del consejo de administración del Grupo Mexicano de Desarrollo (GMD) y uno de los principales beneficiarios, junto con su familia y sus empresas, del Fobaproa. Su "rescate" se aproximó a los 10 mil 700 millones de pesos, en préstamos empresariales (GMD y Synkro, 7 mil 900 millones) y personales (2 mil 800 millones). De hecho, en la lista de créditos relacionados del auditor canadiense Michel Mackey, este businessman aparece con alrededor de 950 millones de pesos concedidos por Inverlat (del que era accionista) y Bancen. Del generoso rescate carretero que concedió el gobierno de Ernesto Zedillo, GMD se echó a la bolsa alrededor de 30 por ciento del total. En ese entonces, entre los miembros del consejo de administración de GMD aparecía Claudio X. González Laporte. Por una mera causalidad, Jorge Ballesteros Franco también era miembro del consejo de administración de Kimberly Clark de México, que preside el multicitado Claudio X., aunque también lo fue del Grupo Financiero Interacciones (de la familia Hank) y del Grupo Financiero Serfin. Actualmente, su hermano José Luis es miembro del consejo de administración del Grupo Financiero Ixe, posición que también ocupaba Vicente Corta, ex secretario ejecutivo del IPAB.

MIGUEL ALEMAN MAGNANI, junior del gobernador de Veracruz, Miguel Alemán Velasco, también es "abajo firmante". Este joven empresario fue, junto con Emilio Azcárraga Jean, uno de los principales accionistas del Grupo ECE, que administraba en México las franquicias de las cadenas restauranteras Hard Rock Café y Rain Forest, entre otras, y que encabezaba Guillermo González Guajardo, hijo de Claudio X. González Laporte. El Grupo ECE fue el que obtuvo el primer lugar en el concurso por la concesión, otorgada por la Secretaría de Gobernación, para operar el nuevo Hipódromo de Las Américas, luego de firmar un convenio con el ex concesionario Justo Félix Fernández López (a quien también le echó una manita el Fobaproa). Sin embargo, al enterarse de que se convertiría en patrón sustituto de los empleados del Hipódromo, y por ello en responsable y heredero de los pasivos bancarios y fiscales que dejaba don Justo, el Grupo ECE declinó de inmediato. La Segob optó por otorgarle la concesión al segundo lugar, la empresa OCESA de Alejandro Soberón Kuri, que se menciona líneas abajo. En sus mejores tiempos, el Fobaproa rescató a la empresa Accel, que presidía Eloy S. Vallina, en cuyo consejo de administración participaba Miguel Alemán Velasco.

HENRY DAVIS SIGNORET ES otro de los hombres de negocios "comprometidos con México". Este personaje no es otro que el del Registro Nacional de Vehículos, el oscuro Renave, amigo del torturador Cavallo y ex accionista del Grupo Financiero Banamex-Accival, del Grupo Cifra (Aurrerá, Vips y El Portón, entre otros) y Nadro. Compartió asiento en el consejo de administración de Banamex con Claudio X. González Laporte, Angel Losada, del Grupo Gigante, y Daniel Servitje Montull, del Grupo Bimbo, estos dos últimos también "abajo firmantes" del Grupo 21.

EL MULTIFACÉTICO EMPRESARIO veracruzano Antonio Chedraui Obeso también fue miembro del consejo de administración de Banamex y compañero de andanzas de Claudio X. González Laporte. Cabeza del Grupo Comercial Chedraui (con un valor de mercado cercano a los 4 mil millones de pesos en marzo de 2001). El Fobaproa también fue generoso con este personaje (327 millones) rescatándole, entre otras, a su empresa Factoring Corporativo, un consorcio de factoraje con cartera de cadenas comerciales, entre ellas la propia. Con intereses en Serfin y Grupo Financiero Inbursa, es accionista del Grupo Aeroportuario del Sur.

LA LISTA NO SE AGOTA con los connotados hombres de negocios que se mencionan, pero el espacio sí. Mañana continuaremos con los distinguidos militantes del Grupo Claudio 21.

Las rebanadas del pastel: