LUNES Ť 29 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť La iniciativa plantea modificar la ley para financiar con ahorros Pemex y CFE

Formaliza PAN petición de usar Siefore en sector energético

CIRO PEREZ SILVA

Como parte de las propuestas para reactivar el sector energético del país, el grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados propuso formalmente el uso de los recursos depositados en los Sistemas de Ahorro para el Retiro en infraestructura y desarrollo del mismo.

A diferencia de la iniciativa planteada en el Senado, en ésta se pretende modificar la ley a fin de que los ahorros contribuyan al financiamiento directo tanto de Pemex como de la Comisión Federal de Electricidad.

Ello en virtud de que el ordenamiento actual para las Afore impide que puedan adquirir para sus afiliados títulos emitidos por las empresas de energía ni por ningún tipo de paraestatal, ya que tales títulos no necesariamente coinciden con aquellos que la ley autoriza que formen parte de la cartera de las Siefores.

Este tema, junto con el de la reforma hacendaria, señalaron los panistas, son dos de las prioridades del gobierno foxista para el presente periodo de sesiones, cuya discusión se estableció para la primera quincena de diciembre.

En la exposición de motivos de la iniciativa se menciona que, desde el punto de vista estrictamente legal, las Afore, para evitar el creciente problema de falta de viabilidad financiera que el IMSS ha presentado en cuanto al pago de las jubilaciones; además, se tenía por objeto fomentar el ahorro interno en nuestro país.

Por cuestiones operativas este sistema fue en su momento óptimo, dado que se evitó una mayor erosión del sistema, ya que los recursos utilizados para el pago de las pensiones provenían exclusivamente de las cuotas que los trabajadores en activo aportaban y éstas eran, año con año, insuficientes.

Los ahorros de los trabajadores actualmente se destinan en 90 por ciento a valores del gobierno federal. El resto está invertido en valores privados, destacando los bancarios y los de empresas grandes cuyo prestigio y resultados ofrecen a los trabajadores niveles de seguridad y rendimiento aceptables. Es el caso de los títulos de Ford, Cementos Mexicanos o Televisa. Si bien el financiamiento al sector privado ha crecido desde el inicio del sistema, éste aún es muy reducido.

De hecho, el sistema mexicano muestra uno de los grados de concentración más grandes en títulos del gobierno nacional, hecho que tiene efectos negativos sobre la economía. Destaca que la Secretaría de Energía ha publicado las estimaciones sobre las inversiones que en los próximos diez años serán necesarias para garantizar el crecimiento de la oferta de electricidad. Estas estimaciones rondan los 40 mil millones de pesos anuales.

Pemex también está "sediento" de recursos para invertir a largo plazo, a fin de ampliar la exploración de campos, construir y dar mantenimiento a pozos, conservar y ampliar refinerías, y modernizar sus complejos petroquímicos. Estas inversiones bien pueden rebasar lo que requiere el sector eléctrico, lo que exclusivamente para fines de energía presenta requerimientos de inversión que podrían sumar los 100 mil millones de pesos anuales.

"Al cierre de agosto de 2001 y según la Consar, lo acumulado en la subcuenta de retiro de todos los asegurados al IMSS rebasaba los 217 mil millones de pesos, y por otra parte, las aportaciones en los bimestres de pago al Seguro Social destinadas a estas subcuentas suman cerca de 5 mil millones de pesos. Estas cifras llevan a concluir dos cosas: la primera, que los recursos en las Afore son por sí solos insuficientes para cubrir las necesidades de financiamiento de las empresas de energía. Luego de cuatro años de acumulación, el saldo sólo permitiría financiar los próximos dos años de infraestructura de energía. Por tanto, ni siquiera una arriesgadísima concentración de 100 por ciento en este sector es una solución de largo plazo."

La segunda conclusión es que los ahorros provisionales bien podrían contribuir a su financiamiento. Si se revisa el artículo 43 de la Ley del SAR, se ve que las Afore no pueden adquirir para sus afiliados títulos emitidos por las empresas de energía ni por ningún tipo de paraestatal, puesto que tales títulos no necesariamente coinciden con aquellos que la ley autoriza a formar parte de la cartera de las Siefore.