DOMINGO Ť 28 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Ricardo Watty: personal del INM allanó casa del migrante en Nuevo Laredo
Deportan a 9 centroamericanos en acción antiterrorista
JOSE ANTONIO ROMAN ENVIADO
Morelia, Mich., 27 de octubre. Con el objetivo de aprehender a presuntos terroristas, personal del Instituto Nacional de Migración (INM) allanó la Casa del Migrante en la diócesis de Nuevo Laredo, Tamaulipas, acción que dio por resultado la detención y deportación de nueve ciudadanos centroamericanos, denunció aquí el obispo de dicha diócesis, Ricardo Watty Urquidi.
Señaló que en los lugares y barrios donde tradicionalmente se ubican las personas que pretenden cruzar la línea fronteriza con Estados Unidos se han "multiplicado" las "redadas" de los elementos de migración, en busca de ciudadanos extranjeros.
Watty Urquidi, quien asiste al decimosegundo Congreso Nacional Misionero (Conami), que se realiza en esta ciudad, explicó que si bien se respetaron los derechos humanos de los centroamericanos que fueron deportados y no se ejerció la violencia, "no nos agrada" este tipo de acciones de las autoridades migratorias, aunque se hagan bajo la justificación de que lo hacen en cumplimiento de su deber.
Dijo que si bien no se levantó ninguna denuncia por los hechos que ocurrieron hace tres semanas, aún están en espera de diálogar con las autoridades, especialmente con la funcionaria que se desempeña como nueva delegada del INM en la ciudad de Nuevo Laredo, a fin de definir si este tipo de acciones serán cotidianas en el trabajo del instituto. Y es que con el objetivo de encontrar presuntos terroristas, "pagan justos por pecadores", indicó.
El obispo de Nuevo Laredo dijo que las medidas de seguridad no sólo se han incrementado en el lado estadunidense, sino también en territorio nacional.
Por otra parte, consideró que el número de personas que pretenden cruzar hacia Estados Unidos se ha reducido, tal vez 25 por ciento, en parte por la situación de incertidumbre y sicosis que priva en aquella nación, y en otra por la rígida vigilancia que existe en la zona fronteriza de ambos lados.
Por el momento los migrantes esperan el desarrollo de los acontecimientos en Estados Unidos y muchos de ellos han decidido permanecer más tiempo en territorio nacional, situación que se observa con claridad en el número de personas que atiende diariamente la Casa del Migrante y que va en aumento, según señaló en entrevista realizada en el marco del congreso misionero.
El obispo Watty también se refirió al homicidio de la defensora de derechos humanos Digna Ochoa y Plácido. Tras externar su enérgica condena, dijo que el "desastroso crimen" tiene que ser motivo de análisis para saber qué está sucediendo en el país. En una primera reflexión, consideró que este hecho nos enseña que todavía nos falta mucho que recorrer en el camino del respeto a los derechos humanos y en el de la democracia.
"Este asesinato es un signo de que estamos en ciernes, iniciando una cultura democrática, porque recurrir a este tipo de actos violentos, de presión, a todas luces condenables, significa que no toleramos las posturas distintas, las acciones diferentes y mucho menos respetar los derechos humanos", dijo tras señalar que las autoridades gubernamentales están obligadas a esclarecer el caso y sentar precedente de que no se tolerará más este tipo de actos.
Asimismo, el jerarca eclesiástico expresó su deseo de que estos hechos reprobables no se hagan recurrentes hacia otras personas, que al igual que Digna Ochoa luchan por la justicia y el respeto de los derechos humanos de sus semejantes.