Ť Peligran los diálogos de paz por la petición de extraditar a jefes insurgentes, advierten

Exigen las FARC a Pastrana se pronuncie sobre el calificativo de terroristas que les dio EU

Ť La embajadora Anne Patterson comparó a los rebeldes con el grupo de Bin Laden

AFP Y DPA

Santafe de Bogota, 26 de octubre. El máximo dirigente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda Vélez, Tirofijo, exigió al presidente Andrés Pastrana un pronunciamiento sobre la catalogación como "terroristas" en la que Estados Unidos mantiene al grupo armado.

La embajadora estadunidense en esta capital, Anne Patterson, sostuvo el miércoles pasado que los "terroristas" de la red Al Qaeda, de Osama Bin Laden, y los rebeldes colombianos comparten su "hipocresía y su falta de ideas", al tiempo que se manifestó por la extradición a su país de los líderes vinculados al narcotráfico de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional y las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Las tres organizaciones son consideradas como "terroristas" por Washington.

"El régimen talibán y Osama Bin Laden no representan al Islam, religión dedicada a la paz, la compasión y el bienestar. De la misma forma los grupos terroristas y narcotraficantes en Colombia demuestran su cinismo e hipocresía cuando afirman que buscan la justicia social... pero la injusticia social no se puede acabar secuestrando colombianos con fines de extorsión", afirmó Patterson, de acuerdo con un reporte del diario El Tiempo.

"Existe un nexo similar en las actividades violentas de los tres grupos terroristas en Colombia. A diferencia de los de Afganistán, los grupos colombianos no tienen un alcance mundial directo. Sin embargo, cada uno ejerce terrorismo sobre los colombianos y debilita las bases de la democracia más antigua de América Latina", aseveró la diplomática.

Más aún, Patterson sugirió que en adelante el antidrogas Plan Colombia -apoyado por Washington con mil 300 millones de dólares- formará parte del combate contra el terrorismo en el país andino.

La embajadora dijo que a través de esa estrategia se perseguirán las fuentes de financiamiento de los rebeldes y los paramilitares colombianos quienes, señaló, al igual que los talibán, "han utilizado las instituciones financieras internacionales para lavar dinero y continuar financiando sus actividades terroristas".

Tras los atentados contra Estados Unidos el pasado 11 de septiembre, se generó una polémica en ese país entre el Departamento de Estado y el Pentágono, prevaleciendo la postura de éste último en el sentido de que había que considerar a los grupos armados colombianos blanco de la actual ofensiva contra el terrorismo.

A las declaraciones de Patterson esta semana, el canciller Guillermo Fernández de Soto respondió que si la actuación de los grupos armados "los conduce a que sean enfrentados simplemente como terroristas, es claro que Colombia y la comunidad internacional han adoptado en el Consejo de Seguridad (de la ONU) medidas vinculantes que no se pueden ignorar. En este orden de cosas, Colombia cumplirá con su obligación constitucional y sus compromisos internacionales".

Sin conocer la respuesta del gobierno, el vocero de las FARC, Raúl Reyes, dijo el viernes que las declaraciones de la embajadora estadunidense sobre la extradición de jefes guerrilleros por narcotráfico ponían en aprietos los diálogos de paz, reportó hoy el diario El Tiempo.

Reyes, quien criticó la intervención de Washington en la política colombiana, le entregó al comisionado para la Paz, Camilo Gómez, una carta del máximo comandante insurgente Manuel Marulanda para Pastrana.

En la misiva, el máximo líder de las FARC exigió a Pastrana un "pronunciamiento público y directo" sobre la posición de su gobierno "acerca del calificativo de organización terrorista" que Estados Unidos dio a las FARC.

Marulanda responsabilizó a Pastrana de una eventual ruptura de las negociaciones de paz, y lo acusó de haber puesto fin a las garantías del diálogo, entre las que citó los continuos sobrevuelos militares sobre la zona de despeje de 42 mil kilómetros al sur del país, así como el hecho de que no se han adoptado acciones para combatir al paramilitarismo.

A todo esto, un reporte divulgado por El Tiempo señaló que los paramilitares han copado, en lo que va del año, 47 municipios colombianos, en una estrategia que busca desalojar a los rebeldes de sus "santuarios" y preparar el ingreso de los escuadrones de derecha a las ciudades.

Asimismo, se reportó el asesinato de nueve campesinos en Chiriguana, a 550 kilómetros al norte de esta capital, y en Fresno, otro pequeño poblado a 120 kilómetros al oeste. Las dos acciones fueron atribuidas a las AUC.