DOMINGO Ť 28 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Es piedra angular de la estabilidad mundial, dicen

Defienden Rusia y China tratado antimisiles que EU busca suprimir

AFP, DPA Y AP

Moscú, 27 de octubre. Rusia y China declararon hoy que el Tratado de Misiles Antibalísticos (ABM), firmado en 1972 por estadunidenses y soviéticos, sigue siendo la piedra angular de la estabilidad estratégica internacional, al término de un encuentro entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y el vicepresidente chino, Ho Jintao.

La declaración de Putin y Ho se produjo en momentos en que la Casa Blanca señaló que es cuestión de meses el abandono de ese tratado, según un despacho.

La administración del presidente George W. Bush defiende la instalación de un polémico escudo de defensa antimisiles, e incluso amenazó hace varios meses con abandonar unilateralmente el ABM de persistir la negativa de Moscú a modificar ese tratado, que considera obsoleto.

El gobernante ruso y el vicepresidente chino discutieron este sábado mecanismos para mantener y fortalecer la estabilidad estratégica, de la cual, subrayaron, el tratado ABM es "la piedra angular".

Durante el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se efectuó la semana pasada en Shanghai, Putin y el presidente chino, Jiang Zemin, reiteraron sus oposición a los planes estadunidenses de crear un sistema nacional de defensa al reafirmar su adhesión al tratado de cohetes antibalísticos de 1972.

De otro lado, Rusia anunció que proveerá en los próximos meses de 40 tanques y más de un centenar de vehículos a la oposición armada afgana integrada en la Alianza del Norte.

Hasta el fin de año, la Alianza del Norte recibirá 40 tanques del anticuado modelo T-55 para su lucha contra el régimen talibán, así como 80 vehículos blindados de combate y varias decenas de unidades para transporte de tropas.

El valor de la ayuda ya prestada y anunciada para fines de 2001 de Rusia a la Alianza del Norte se estima en 45 millones de dólares, explicó una fuente en Moscú.

En este contexto, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Igor Ivanov, afirmó que el futuro gobierno que sustituya al régimen talibán, que controla la mayor parte de Afganistán desde 1996, no debe ser ni proruso ni proestadunidense.

Este nuevo gobierno, dijo, sólo deberá beneficiarse del apoyo de los países fronterizos con Afganistán y de aquellos que desempeñan un papel importante en la región.