DOMINGO Ť 28 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Hay mentalidades totalitarias que ponen en riesgo las libertades: rey Juan Carlos
Ofrecen 33 países impulsar la democracia en todo el mundo y luchar contra el terrorismo
Ť Durante la conferencia de dos días se creó el Club de Madrid, que cumplirá labores de vigilancia
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 27 de octubre. La Conferencia sobre Transición y Consolidación Democrática concluyó hoy en esta capital con la promesa de 33 países de impulsar la democracia en todo el mundo y cooperar en la lucha contra el terrorismo.
En el marco de la conferencia, alrededor de cinco mil personas se manifestaron en Madrid contra las operaciones militares estadunidenses en Afganistán. "La guerra no es la salida al terrorismo, al contrario, aumenta la violencia y es una gran mentira", afirmó Gazpar Lamazares, coordinador de la coalición de mayoría comunista Izquierda Unida.
El ex presidente de la desaparecida Unión Soviética, Mijail Gorbachov, pidió que concluyan "cuanto antes" los bombardeos sobre Afganistán para dar paso a la fase política que instaure un nuevo régimen político en el país, no obstante que reconoció la importancia de derrotar a "los terroristas", cuya base de operaciones, dijo, es Afganistán.
Estados Unidos no está luchando contra el pueblo de Afganistán, sino que está creando las condiciones para un cambio de régimen, "pero aunque no queramos causar sufrimiento o más víctimas es imposible que eso ocurra", afirmó el ex mandatario al término de la reunión.
Durante el encuentro de dos días, se creó el llamado Club de Madrid, que busca ejercer de órgano consultivo en los procesos de transición democrática, dará recomendaciones prácticas que se adapten a la situación particular del país y que puedan aplicarse inmediatamente, además de seguir la evolución de la democracia en el mundo.
En el acto de clausura, el rey Juan Carlos leyó un discurso en el que subrayó que "la democracia es el único sistema político digno de la especie humana", tras señalar que los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y Washington demostraron que existen "mentalidades totalitarias que pretenden poner en peligro el sistema de libertades".
Aunque reconoció que la democracia no se traduce automáticamente en una sociedad justa y perfecta, sostuvo que ningún otro sistema favorece tanto el desarrollo, da medios a los ciudadanos para alcanzar sus sueños o engendra mecanismos para perseguir la corrupción.
Los 38 jefes y ex jefes de Estado procedentes de 33 países emitieron una declaración final en la que se comprometieron a impulsar la democracia en un mundo globalizado, formar un comité de vigilancia -el Club de Madrid- y reiteraron su compromiso a luchar contra el terrorismo internacional.
En los últimos años la democracia ha hecho grandes avances en muchos países pero se enfrenta a antiguos y nuevos retos derivados de amenazas como el terrorismo, las reacciones a la globalización y una creciente desigualdad, añadió la declaración