Ť Fracasa ofensiva de opositores en Samangan

Persigue régimen talibán a presunto emisario de EU y seguidor de Haq

REUTERS, AFP, DPA Y AP

Kabul, 27 de octubre. La milicia talibán perseguía este sábado a un supuesto emisario estadunidense que escapó tras la captura y posterior ejecución del líder afgano opositor Abdul Haq, al tiempo que la oposición fracasaba en un nuevo intento de ofensiva en la provincia norteña de Samangan, pese a haber recibido apoyo -con intensos bombardeos- de Estados Unidos en la región.

"Fue detectado con Abdul Haq y sabemos que su nombre es Jamber Jihi", indicó el portavoz del Ministerio de Información, Abdul Hanan Himat. Añadió que se buscaba tras los sucesos ocurridos en la provincia de Logar, al este del país y a sólo 30 kilómetros al oeste de la frontera con Pakistán.

El vocero hizo énfasis en que la caída del líder opositor "es un gran fracaso para los planes de Estados Unidos para Afganistán, y rechazamos de manera enérgica la negativa estadunidense de que no estaba detrás de la trama".

En Washington, funcionarios estadunidenses reconocieron haber enviado un avión espía Predator sin tripulación y equipado con misiles antitanque para tratar de rescatar a Haq, tras haber pedido ayuda al verse sorprendido por las fuerzas del talibán.

Himat señaló: "Me gustaría decir que Estados Unidos estaba envuelto en una operación aérea para rescatarlo".

Fuentes estadunidenes dijeron que Haq, un legendario luchador contra la ocupación soviética en la década de los 80, usó un teléfono satelital para comunicarse con alguna "amistad" en Pakistán, y ésta, a su vez, llamó a Estados Unidos pidiendo ayuda.

Pese a que se habló de que un avión y dos helicóperos acudieron en su auxilio y fallaron, las fuentes estadunidenses afirmaron que los militares no le pudieron prestar ayuda a tiempo por estar en un área de difícil acceso.

El talibán, que a las pocas horas de capturar a Haq lo ejecutó bajo cargos de espionaje, aseguró que el líder opositor buscaba socavar al régimen islámico provocando una rebelión entre los mandos medios de las tribus pashtún y crear así una "tercera fuerza", debido a que la Alianza del Norte no ha podido lograr ningún avance y está formada por etnias minoritarias.

En una entrevista con la revista Newsweek, hace unas semanas, Abdul Haq declaró que no había podido convencer a Estados Unidos de suspender los bombardeos sobre Afganistán para negociar, ni los talibanes aceptaron entrar en pláticas sobre fórmulas para integrar un nuevo gobierno afgano.

Ante esa perspectiva, dijo, decidió buscar a los mandos medios del talibán, a los comandantes de división y a los comandantes de cuerpo, a quienes pensaba decirles que sus líderes "están locos" e instarlos a juntarse entre ellos y otras tribus para trabajar juntos y así "bajar las banderas del talibán e izar nuestra propia bandera".

La eliminación de Haq fue interpretada por analistas de los medios de información como un mensaje doble del talibán: dirigido a aquellos que pretendían desertar y a los agentes extranjeros que quisieran protagonizar otras operaciones clandestinas.

El cuerpo de Haq y al menos dos de sus seguidores caídos se encuentran ya en Kabul. Según informes, iban a ser trasladados a la fronteriza ciudad paquistaní de Peshawar, donde van a ser sepultados el domingo.

El depuesto presidente afgano Burhanuddin Rabbani declaró que la muerte de Abdul Haq es un incidente trágico y que esto demostraba la "crueldad" del talibán. Añadió que la lucha en Afganistán puede prolongarse más allá del Ramadán, que comenzará el 17 de noviembre.

Afirmó que como oposición aún no han decidido la fecha para lanzar una ofensiva, pero aseguró que son partidarios de terminar la guerra y que sea el pueblo quien elija a sus gobernantes. Pero otros líderes de la Alianza del Norte se comprometieron a seguir la lucha armada.

Mientras tanto, el talibán desmintió informaciones de haber ejecutado a cinco comandantes de la Alianza del Norte, supuestamente capturados el viernes en la batalla en el área de Dara Souf, en la provincia de Samangan, de acuerdo con el vocero mullah Amir Jan Muttaqi, quien dijo que los reportes eran "falsos".

La agencia Aip reportó previamente que el talibán había capturado a cinco comandantes opositores y a otros 15 combatientes, y que los comandantes habían sido ahorcados. Incluso, citó que uno de los comandantes caídos era Mohamed Bilal.

Por otra parte, el régimen talibán reiteró su advertencia de que los extranjeros que ingresen al país sin autorización serán tratados como espías y enfrentarán "medidas serias", en alusión a la detención de un supuesto periodista estadunidense en la zona de Boldak.

También confirmaron que llevarán ante un tribunal islámico al periodista francés Michel Peyrad, acusado de realizar labores de espionaje, una vez que ha concluido la investigación y "comparecerá en unos días". El enviado de París Match se encuentra arrestado desde el 9 de octubre.