SABADO Ť 27 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Me referí a problemas de drogas y al sistema de entrenamiento en Bulgaria, aclara

Nunca dije que Soraya se dopa, asegura Levín

Ť Las operaciones que se ha hecho la campeona olímpica pueden traerle consecuencias, dice

El estadunidense Murray Levin, presidente de la Confederación Panamericana de Levantamiento de Pesas, aclaró que nunca dijo que Soraya Jiménez tomaba sustancias prohibidas, por lo que estaba "sorprendido por las declaraciones (de la campeona olímpica) contra mí''.

Señaló que habló del dopaje que enfrenta Bulgaria luego de "la desgracia que ocurrió en Sydney en los Juegos Olímpicos por problemas de drogas y el entrenador en jefe fue despedido'', como lo informa la revista oficial de la Federación Internacional del ramo, que expone la miseria y los problemas de los búlgaros al no poder solucionar esa situación.

"Fui elegido presidente panamericano y no sólo es mi responsabilidad, sino mi obligación dar seguimiento a cualquier escándalo o problema que pueda surgir para tomar medidas y prevenir problemas'', expuso el estadunidense.

En un comunicado difundido por la Conade a petición de la presidenta de la Federación Mexicana de Halterofilia, Martha Isela Elizondo, Murray precisó que durante su estancia en México con motivo del Festival Olímpico de Pesas, en agosto pasado, se refirió a que el sistema de entrenamiento de los búlgaros es tan intenso que producen lesiones, no solamente en Soraya, sino también en otros pesistas del área.

"La vi levantar un poco antes en Santo Domingo (Panamericano) y me dijeron que se sometería a otra cirugía, y para una joven dama de 24 años esto puede traer consecuencias posteriores en su vida.

"Esta es mi opinión y la de muchos otros en este deporte. He estado en las pesas por más de 50 años y sé bien que el cuerpo no puede recuperarse rápidamente y ese sistema (búlgaro) no es bueno para la mayoría de los levantadores'', sostuvo Levin.

Destacó que se tienen proyectos en México para el próximo año, como la sede del campeonato mundial, la construcción de tres centros de alto rendimiento y un congreso con los más famosos halteristas y entrenadores de todos los tiempos, entre ellos Tommy Kono, quien alguna vez fue entrenador nacional del equipo mexicano.