viernes Ť 26 Ť octubre Ť 2001
Luis Javier Garrido
La abogada
Los últimos acontecimientos han llevado a muchos a entender qué es lo que está realmente pasando en México y cuál es la naturaleza del régimen que encabeza Vicente Fox.
1. Gabriel García Márquez dijo alguna vez que el ejército disparando contra una multitud inerme en una plaza de América Latina es un lugar común de nuestra historia. Podría haber dicho que también lo es ver a las fuerzas armadas ocupando los principales campus universitarios del continente o enterarse, una vez más, de que un grupo de militares, judiciales o pistoleros asesinaron por la espalda a una abogada defensora de los derechos humanos.
2. El homicidio de Digna Ochoa, miembro del Centro Miguel Agustín Pro Juárez, no es un crimen más en una sociedad en crisis, como se ha pretendido, sino otro gravísimo crimen de Estado con el que alguno de los sectores más duros del foxismo parece lanzar una advertencia a aquellos miembros de la Iglesia católica más comprometidos en la defensa de los pobres y, por extensión, a toda la sociedad, de que no se va a permitir que se cuestione, y mucho menos que se sancione, a quienes han venido actuando como brazos represores del Estado -antes y después del 2 de julio de 2000- o en tanto que pieza fundamental del narcopoder institucionalizado; es decir, como un componente básico del sistema de poder que durante 18 años sostuvo la tecnocracia priísta y que ahora es sustento del poder de Vicente Fox.
3. La muerte de Digna constituye, paradójicamente, una de sus más fuertes denuncias de lo que está pasando en México, en donde el nuevo gobierno foxista no sólo no ha aceptado modificar las políticas económicas y sociales del pasado, sino que tampoco ha permitido construir una forma distinta de ejercicio del poder a la que prevaleció en los últimos años.
4. Vicente Fox, que no tiene más asesores políticos que Jorge G. Castañeda y Adolfo Aguilar Zínser, a quienes se ha señalado por haberle definido los parámetros de su supuesta transición, tomando como referente los cambios políticos de la España de los setenta y del Chile de los ochenta, y que dócil y subordinado a los dictados de Washington aceptó otorgar plena impunidad a los principales beneficiarios del "antiguo régimen", ha encubierto y protegido los crímenes de los más connotados priístas y está gobernando en función de sus intereses.
5. La muerte de Digna Ochoa, una mujer entregada por completo a la transformación del país por la vía de la legalidad y de la justicia, muestra también la incapacidad de la izquierda tradicional por caracterizar el momento que vive México. Algunos analistas han considerado el hecho como inaceptable "por tener México un régimen democrático"; Cuauhtémoc Cárdenas asumió en el mitin frente a Gobernación que hay en el gobierno personas empeñadas en que se transite a una "convivencia democrática" (22 de octubre), y esa misma noche el nuevo ombudsman capitalino afirmó en CNI 40 que el asesinato "empaña la transición", confundiendo, una vez más, alternancia con transición. Lo cierto es que lo acontecido no empaña nada porque el gobierno actual no ha entrañado ruptura alguna con el pasado y no es más que la expresión de las más oscuras componendas, con la consecuencia de que los mismos intereses que prevalecieron sobre el país en los últimos años siguen haciéndolo, y eso ya no lo puede ocultar Fox con su discurso mentiroso sobre "el cambio".
6. ƑO qué pensará el titular del Ejecutivo, que los mexicanos no entienden lo que han significado sus decisiones de construir el nuevo aeropuerto en Texcoco, de vender los bancos al capital extranjero o de encubrir los crímenes de los dos pasados sexenios?
7. México tuvo con la alternancia en la Presidencia en el 2000 un cambio de régimen político en la medida en que las relaciones del Ejecutivo con los otros dos poderes y las entidades federativas ya no son de subordinación, pero el sistema real de poder real sigue siendo muy similar. Fox se disciplinó muy fácilmente a los intereses dominantes que se reconvirtieron en los años del salinismo bajo el signo del narcopoder: banqueros, industriales, militares, judiciales y políticos de toda laya, a los que les está brindando toda su protección a cambio de su respaldo.
8. El nuevo Presidente envió muy claras señales a los mexicanos de que iba a proteger el narcosistema de poder al nombrar a Francisco Barrio en la Secodam, para cuidarle las espaldas al salinismo, y a Rafael Macedo de la Concha en la PGR para garantizar la impunidad de los miembros de las fuerzas armadas vinculadas al narcotráfico y a la represión. A Barrio, quien fue un excelente candidato en 1986 y 1992, se le señala como un mal gobernador, entre otras cosas, por su subordinación a Salinas, lo que le valió el mote de "el más salinista de los gobernadores". Y, Ƒquién puede confiar en Macedo de la Concha cuando mantiene presos, por intereses corporativos y personales, contra todo derecho, a los campesinos ecologistas de Guerrero y al general José Francisco Gallardo, cuyo único delito ha sido luchar por que se respeten los derechos humanos de los miembros del Ejército?
9. ƑNo son acaso, por todo esto, miembros de las fuerzas armadas o policías judiciales los principales sospechosos del homicidio de Digna Ochoa?
10. Las primeras semanas de la guerra en Afganistán han marcado un viraje en la percepción que los mexicanos tienen del gobierno de Fox. Es un secreto a voces que no hay cambio alguno y la sangre de Digna está ahí para probarlo. Y para recordarnos que no puede haber un verdadero cambio sin el pueblo. Lo que está en crisis no es la sociedad, sino el aparato del Estado.