VIERNES Ť 26 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Promover controversia, más maduro que organizar marchas y hacer ataques, dice

Cerisola se compromete a buscar indemnizaciones justas para propietarios de terrenos expropiados

Ť ''Las aves tienen opinión propia y lo han demostrado'', comenta en relación con la repercusión ecológica del aeropuerto Ť Los tratados internacionales se cumplirán, ofrece el funcionario

PATRICIA MUÑOZ, CIRO PEREZ Y ROBERTO GARDUÑO

El secretario de Comunicaciones y Transportes, Pedro Cerisola, se comprometió ante diputados a buscar "compensaciones adicionales" para ejidatarios cuyos terrenos serán expropiados para construir el nuevo aeropuerto.

Sorprendió a los legisladores cuando al ser interrogado sobre la repercusión ecológica del proyecto señaló: ''las aves tienen opinión propia y lo han demostrado". Incluso fue más allá. Argumentó que las aves llegaron a la zona del actual aeropuerto después de que éste se estableció y "decidieron que pueden convivir perfectamente con los aviones".

No lo dijo una ni dos veces, sino varias y de distintas formas: las aves deciden y tienen opinión. Aseguró que los tratados internacionales en materia de protección de fauna se van a cumplir y expuso que cuando empezaron a llegar las aves a la zona del actual aeropuerto las autoridades previeron cerrar la terminal por este problema, pero "se demostró que pueden convivir perfectamente las aves, porque así lo decidieron ellas".

No tengo la garantía de que las aves dejen de llegar, al contrario, hay la certeza de que seguirán llegando; "lo comenté hace un momento y lo digo con todo respeto: las aves llegaron estando el aeropuerto. Quiere decir que el aeropuerto no les estorba y tampoco les estorbará el nuevo, porque va a estar en condiciones exactamente iguales. Esto que les comento está avalado por distintos estudios hechos por varios grupos de especialistas", sostuvo mientras algunos diputados reían por esas serias afirmaciones.

Hay otros aeropuertos -dijo- que operan en condiciones más críticas de aves en todo el mundo, como San Francisco, San Diego, Los Angeles, Nueva York, Montreal y Hong Kong, y en México, Cancún, Tampico, Acapulco y La Paz.

El funcionario insistió también en el asunto de la controversia constitucional que el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, presentará en contra de la construcción de la nueva terminal en Texcoco: ''esto sería más maduro que tomar actitudes mediáticas, como los ataques personales y las marchas''.

Fallero, falto de limpieza, manipulador...

La de ayer no fue una reunión fácil para Cerisola. En reunión con las comisiones unidas de Comunicaciones y Transportes, los diputados le reclamaron que había "cargado los dados" en favor de Texcoco, que resultó un "buen fallero y se salió con la suya", como le dijo el diputado Francisco Patiño, del PRD. Le insistieron en la falta de limpieza del proceso, que se enturbió y se manipuló en forma innecesaria, según apuntó el legislador Omar Fayad, quien fue secundado por otros. En diversos matices le señalaron que es injusto el precio que se les quiere pagar a los ejidatarios y le pidieron que haga algo para corregirlo.

Hubo de todo. Algunos diputados apoyaron a Cerisola y su proyecto; otros clamaron porque "se acaben las críticas", y uno de ellos, Fernando Martínez Cue, pidió que el nuevo aeropuerto lleve el nombre de Vicente Fox Quesada. Aquello arrancó otra vez las risas.

Ante las múltiples referencias que legisladores como Elías Dip Rame, Ismael Estrada Colín, Manuel del Río Virgen, Marcos López, Roberto Preciado Cuevas y Beatriz Cervantes le hicieron para que se reconsidere el precio que se pagará por los terrenos a los ejidatarios afectados, Cerisola dijo compartir la opinión de que se les indemnice con justicia y equidad.

No obstante, se deslindó de los precios establecidos por hectárea, pues no los fijó la SCT sino la Comisión de Avalúos de Bienes Nacionales, organismo descentralizado de la Secodam. Dijo que aun cuando por ley la dependencia tiene que acatar estos avalúos, se pueden encontrar otros mecanismos para compensar a los afectados.

Se comprometió a tomar en cuenta los planteamientos de los legisladores y a trabajar en la parte de precios, e invitó a los diputados a encontrar estos mecanismos especiales en favor de los ejidatarios. Incluso señaló: "si hubiera alguna forma de que esto fuera diferente, les agradecería a ustedes, como Poder Legislativo, nos digan cuáles puedan ser estas alternativas".

El secretario confirmó que sí hay una estrategia con el estado de México para atender los reclamos de los propietarios, pero apenas está iniciando, porque el gobierno federal no podía negociar un plan para los ejidatarios antes de que se hubiera tomado una decisión en torno al aeropuerto y antes de haberla hecho pública.

Dijo que se buscará la forma en que se va a involucrar a la gente de los poblados expropiados y aceptó que se debe tomar conciencia al respecto y se debe empezar a platicar en un ambiente constructivo, no crítico, porque la crítica seguramente nunca se acabará.

"Comparto en lo personal la opinión de los legisladores, en cuanto a tratar con justicia y equidad a los ejidatarios al hacer que se les expropien las tierras. En lo institucional, tengo que cumplir con las leyes y normas que este mismo Congreso ha aprobado", indicó Cerisola, y les pidió apoyo, porque son quienes conocen las leyes y las aprueban.

''Si ustedes me ayudan a encontrar un camino por la cual la normatividad y las leyes existentes pudieran ser interpretadas de una forma distinta, para darle cauce a las inquietudes por ustedes planteadas, se los agradecería", añadió

Cuando el secretario abandonaba el recinto, unos 100 ejidatarios de San Salvador Atenco, región donde se va a construcción el aeropuerto, demandaban a las afueras de la Cámara de Diputados el apoyo de los legisladores para que sus tierras les sean pagadas de forma justa.