VIERNES Ť 26 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Insta Washington a Tel Aviv a replegarse del resto de los territorios palestinos
Anuncia Israel retiro escalonado de Cisjordania
Ť Francotiradores israelíes asesinan a un guardia de Yasser Arafat cerca de Belén
DPA, REUTERS, AFP Y AP
Jerusalen, 25 de octubre. El gobierno de Israel decidió esta noche hacer un retiro escalonado de Cisjordania, donde ocupa seis ciudades bajo control palestino. La decisión surgió luego que el ejército israelí se retiró de la población de Beit Rima, cercana a Ramallah, mientras francotiradores israelíes mataron a un miembro de la guardia presidencial del líder palestino Yasser Arafat e hirieron a otro en el campo de refugiados de Aida, cerca de Belén.
Las tropas israelíes irrumpieron la mañana del miércoles en Beit Rima, en respuesta al asesinato del ministro de Turismo, Rehavam Zeevi, el pasado 17 de octubre. En la acción, reportaron fuentes palestinas, fueron asesinados nueve palestinos, aunque un portavoz militar israelí afirmó que el número de muertos era de seis.
Analistas señalaron que la medida israelí de retirar sus tropas de Beit Rima fue la señal más clara, hasta el momento, de que Tel Aviv ha comenzado a ceder a las demandas de su más fuerte aliado: Washington.
Estados Unidos ha tratado de frenar los violentos enfrentamientos entre palestinos e israelíes, mientras busca el apoyo árabe a su alianza antiterrorista, tras los atentados del 11 de septiembre.
El canciller israelí, Shimon Peres, quien regresó de Washington, donde escuchó los pedidos del presidente George W. Bush, dijo confiar en que todas las tropas salgan de las áreas palestinas en cuestión de días.
Horas más tarde trascendió que el gobierno israelí decidió retirar al ejército en forma escalonada de las seis ciudades autónomas palestinas de Cisjordania. "La retirada debe empezar en sectores en los que ha vuelto a reinar la calma, posiblemente el sábado por la noche o el domingo", indicó a la Afp una fuente que no fue identificada, tras una reunión del minigabinete de seguridad llevada a cabo esta noche.
El encuentro incluyó al primer ministro Ariel Sharon y los ministros Shimon Peres, de Exteriores; Binyamin Ben Eliezer, de Defensa; Silvan Shalom, de Finanzas; Eli Yisahi, del Interior; Ephraín Sneh, de Transportes; Nathan Charansky, de Vivienda, y Avigdor Lieberman, de Infraestructuras Nacionales.
A su vez, Bush recibió con beneplácito la retirada de las tropas israelíes de Beit Rima e instó a Tel Aviv a replegarse del resto de las áreas palestinas, indicó su vocero Ari Fleischer. El mandatario estadunidense también exhortó a la Autoridad Nacional Palestina (ANP), a hacer lo posible por reducir la violencia y llevar a la justicia a los responsables del asesinato de Zeevi.
La ANP declaró el jueves como día oficial de luto por los muertos en Beit Reema. "Entablaremos una demanda contra Sharon ante un tribunal internacional", declaró Abed Rabbo a la radioemisora Voz de Palestina. "El es un modelo para los asesinos y carniceros que provocan baños de sangre, pensando que haciendo eso someterán la voluntad de los pueblos."
Durante la noche del miércoles hubo nutridos tiroteos en la aldea y los tanques israelíes quedaron emplazados a pocos kilómetros de la iglesia de la Natividad.
En Tulkarem los soldados israelíes avanzaron desde sus posiciones en las afueras de la ciudad y rodearon la casa del gobernador palestino disparando sus armas automáticas, según los palestinos. No se reportaron heridos y los militares israelíes se negaron a comentar el despliegue. El ejército isarelí dijo que los soldados detuvieron a varios palestinos sospechosos de participar en el asesinato del ministro de Turismo.
Sin embargo, las fuerzas israelíes sólo se retiraron del pueblo de Beit Rima, y mantenían esta noche sus posiciones en seis ciudades autónomas de Cisjordania.
El policía Wahid Abayad, de 20 años, que fue muerto por soldados israelíes, era miembro de la Fuerza 17, servicio encargado en particular de la custodia del líder palestino Yasser Arafat. Otra persona resultó herida en ese ataque.
Hassan Abu Saryeh, de 42 años, fue alcanzado mortalmente en el campamento de refugiados de Nor-el-Chams. Mientras que Feras al-Salahat, de 25 años, también murió tras ser herido en Doha, cerca de Belén, en un intercambio de disparos con soldados israelíes.
Desde el inicio de la intifada, el 28 de septiembre del año pasado, han muerto 924 personas, 724 palestinos y 178 israelíes.