JUEVES Ť 25 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Abordarán obispos católicos el tema en asamblea
La enseñanza debe tener un papel más trascendente en el país: Berlie
JOSE ANTONIO ROMAN
En medio de los contrastes económicos que vive el país, la educación está llamada a jugar un papel mucho más trascendente y convertirse en una verdadera palanca del desarrollo nacional, afirmó el arzobispo de Yucatán, Emilio Carlos Berlie Belaunzarán, quien anunció que en la 72 asamblea del Episcopado Mexicano, a realizarse del 12 al 16 de noviembre próximo, el tema principal será la educación superior en México.
Berlie también informó que el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Reyes Tamez Guerra, y el subsecretario de Educación Superior, Julio Rubio, han confirmado su asistencia a dicha asamblea, a fin de intercambiar puntos de vista con la jerarquía católica.
En conferencia de prensa, el jerarca eclesiástico expresó su satisfacción por el contenido del Programa Nacional de Educación 2001-2006, presentado el pasado 28 de septiembre. Incluso, destacó la "valiosa coincidencia" entre el proceso de reflexión educativa que realiza la Iglesia católica y las expectativas y propuestas que plantea dicho programa.
Hay una convicción compartida por la Iglesia y otros sectores sociales acerca de la importancia de que la educación superior enfrente simultáneamente los retos de ampliar su cobertura y propiciar la equidad, alcanzando al mismo tiempo exigentes niveles de calidad.
Asimismo, apuntó que se descubre con gusto que en el programa del gobierno federal se propone ofrecer mecanismos sólidos para facilitar la participación de la sociedad en la acreditación, la evaluación y la mejora continua de la educación superior, proceso en el que los católicos también tienen una palabra que ofrecer y experiencias para compartir.
Berlie comentó que la comisión que coordina los trabajos preparatorios para la asamblea episcopal retoma la invitación que hace el mismo programa educativo a participar con propuestas tendientes a "flexibilizar" los marcos normativos que permitan a las instituciones privadas mostrar niveles cada vez más altos de calidad y gestionar más eficientemente la innovación que exige un entorno cada vez más complejo.
Durante la conferencia, el rector de la Universidad Iberoamericana Golfo-Centro, con sede en Puebla, Carlos Velazco Arzac, consideró que ante la gran demanda que tendrá la enseñanza superior en los próximos años, al gobierno le será imposible destinar recursos suficientes, pues se estima que tendrían que abrirse unas diez universidades con capacidad para 50 mil alumnos cada una.
Por ello, agregó, es importante desde este momento la participación de planteles con administración privada, pero también se obliga a las autoridades a ser mucho más responsables en el manejo del gasto de la educación superior pública, pues ésta es pagada por todos los contribuyentes.
Velazco Arzac, quien también forma parte de la comisión que preside el arzobispo Berlie, reconoció que el constante recorte presupuestal al gasto social, entre ellos al sector educativo, "lastimó muchos programas", pero expuso que los alumnos tienen la obligación de ser más responsables y solidarios con la institución que los forma.
Además de este tema, los casi 100 obispos que se reunirán el próximo mes también revisarán el quehacer educativo de la Universidad Pontificia de México, que fue reabierta en 1982 y, tras las reformas constitucionales de 1992 en materia religiosa, las autoridades educativas les dieron finalmente la validez oficial a los estudios que ahí se imparten.
De ser necesarios, tras su revisión, se podrían operar incluso algunos cambios a los estatutos que rigen desde hace casi 20 años a la Universidad Pontificia de México.