REPORTAJE

PAN, PRD y PVEM van juntos en 13 de 18 municipios y en 16 distritos

En riesgo, la mayoría del tricolor en el Congreso sinaloense por la alianza

El Revolucionario Institucional tiene los ayuntamientos donde se concentra el mayor número de votantes: Ahome, El Fuerte, Choix, Salvador Alvarado, Guasave, Sinaloa, Badiraguato, Mocorito, Angostura, Culiacán, Elota, Cosalá, San Ignacio y Escuinapa, mientras en sol azteca sólo tiene cinco legisladores, Acción Nacional 11 y el Revolucionario Institucional 24

JAVIER VALDEZ CARDENAS CORRESPONSAL

Culiacan, Sin., 22 de octubre. Las elecciones del 11 de noviembre próximo tienen peculiaridades inéditas en la historia política de Sinaloa, y destaca la alianza lograda por PAN, PRD y PVEM en 13 de los 18 municipios y 16 de los 24 distritos, lo que pone en riesgo la mayoría del PRI en el Congreso local.

En estos comicios participan ocho institutos políticos, incluyendo al debutante Partido Barzonista Sinaloense. Están en juego las presidencias municipales y 24 diputaciones de mayoría, que con otras 16 curules plurinominales conformarán la Legislatura sinaloense. Además se designarán 233 regidores, 142 de ellos de mayoría relativa y 91 de representación proporcional.

Actualmente las alcaldías de Navolato, Mazatlán y Concordia están en manos del Partido Acción Nacional. El Partido de la Revolución Democrática sólo tiene una, El Rosario.

En cambio, el Revolucionario Institucional mantiene la mayoría de los ayuntamientos, entre ellos los que concentran al mayor número de votantes: Ahome, El Fuerte, Choix, Salvador Alvarado, Guasave, Sinaloa, Badiraguato, Mocorito, Angostura, Culiacán ?la capital?, Elota, Cosalá, San Ignacio y Escuinapa.

La hegemonía del priísmo se refleja en el Congreso sinaloense, donde el sol azteca tiene cinco legisladores, el PAN 11 y el PRI 24. Esta situación favorece el mayoriteo para favorecer las iniciativas del gobernador Juan Sigfrido Millán, y el que se envíen a la congeladora propuestas de la oposición con el fin de que no se aprueben.

Los números fríos

El segundo domingo de noviembre podrán sufragar en 4 mil 119 casillas un millón 545 mil 106 ciudadanos sinaloenses. Ese día contarán con 750 boletas 27 casillas especiales, de las que operarán hasta dos en los municipios con mayor población: Mazatlán, Culiacán y Ahome.

Hasta el 21 de octubre, 399 personas ?sobre todo miembros de organizaciones afiliadas al PRI? han solicitado ante el Consejo Estatal Electoral (CEE) fungir como observadores de las votaciones.

La Coordinación de Capacitación Electoral del CEE designó a 28 mil 883 ciudadanos como funcionarios electorales, y de ellos sólo alrededor del 2.4 por ciento rechazó su nombramiento por enfermedad, viajes y otras causas.

Vacíos legales

Con el argumento, emitido sobre todo entre partidos de oposición, de que existen vacíos en la actual Ley Estatal Electoral, han sido numerosas las impugnaciones y recursos de revisión e inconformidad presentadas ante instancias comiciales.

El Tribunal Estatal Electoral (TEE) ha recibido durante este proceso 13 impugnaciones contra resoluciones del CEE o los consejos distritales, por la entrega de las prerrogativas, topes de campaña y la negativa de que los partidos aliados accedan a regidurías de representación proporcional, entre otros motivos.

El CEE ha atendido por su parte seis impugnaciones por similares razones.

Sólo un recurso de revisión constitucional ha llegado al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, interpuesto por PAN, PRD y PVEM, en cuanto al fallo del CEE y TEE, en el sentido de que los partidos que contiendan en alianza no recibirán regidurías plurinominales en municipios donde triunfen.

Rigoberto Ocampo Alcántar, a quienes diputados locales de PRI, PAN y PRD nombraron unánimemente presidente del CEE, aseveró que casi 90 por ciento de los acuerdos del organismo han sido por consenso. Sin embargo, tres casos hicieron a los consejeros emitir votos divididos; en ellos el TEE falló a favor de la oposición.

Uno se refirió a la entrega completa de las prerrogativas que adeudaba el gobierno de Juan Sigfrido Millán ?11 millones de pesos, de un total de 38?, y que el CEE había desistido de exigir; otro es la suma de votos en el que se pretendía anular boletas con más de un logotipo cruzado, y el de las candidaturas comunes.

Los partidos contrarios al PRI reclamaron que las controversias resultaron de los vacíos legales que no pudieron ser modificados al truncarse el proceso de reforma que iniciaron partidos y el gobierno estatal.

La alianza, contrapeso

En julio pasado, con el fin de ganar posiciones que actualmente están en manos del PRI y controla Millán, PAN, PRD y PVEM iniciaron negociaciones entre las directivas estatales y municipales para establecer una alianza opositora. Los tres partidos opositores buscaron concretar el acuerdo en la mayor parte de los 18 municipios, pero sólo en 13 y en 16 distritos locales alcanzaron a conjuntar esfuerzos.

Desde un principio se definió como prioridad eliminar la mayoría priísta en el Congreso del estado, "amarrar" las manos al gobernador para vigilar el manejo de los recursos públicos, generar la democratización del estado y la reforma electoral, así como impulsar cambios constitucionales para restarle poder el Ejecutivo.

Según los dirigentes estatales del PAN y PRD, Luis Roberto Loaiza y Feliciano Castro, respectivamente, la suma de los votos obtenidos por ambos partidos propiciará la derrota del aún partido oficial.

En las más recientes elecciones locales, realizadas en 1998, el PAN alcanzó 273 mil votos en todo el estado, que representaron el 32 por ciento del total; el PRD sumó 147 mil 500 sufragios y el 17 por ciento; y el PRI 397 mil y el 46 por ciento.

Una autocrítica

Para Rubén Rocha, ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) y ex candidato del PRD a la gubernatura en los comicios de 1998, "hay mucha competencia" entre los candidatos de la alianza y el PRI en algunos municipios, entre ellos Guasave, Angostura, Salvador Alvarado, El Rosario, Culiacán y Badiraguato.

Comentó que "hay posibilidades de ganar, pero no son amplias" en la capital sinaloense, donde la alianza opositora no ha logrado repuntar por encima del PRI.

En algunos municipios, sostuvo, el panorama está muy "ajustado" para candidatos no priístas y el esquema de trabajo partidista conjunto no se ha traducido aún en mayor penetración, como en Navolato. Ahí, militantes del blanquiazul encabezados por el ex alcalde Marco César Almaral emigró al Partido Barzonista, y sostiene buena presencia.

"En general, la alianza es exitosa, pero curiosamente, aunque sean más modestas las posiciones del PRD en algunos municipios y distritos, es el que está más cerca de los triunfos", afirmó Rocha.

En principio, expresó, la coalición en Sinaloa rompe "la barrera tradicional de las ideologías de derecha y de izquierda (...) El negrito en el arroz es que no se hayan logrado alianzas donde había más posibilidades de triunfo, como Mazatlán, Guasave, Salvador Alvarado, Sinaloa y Concordia, donde indiscutiblemente se hubiera ganado", dijo. De acuerdo con el ex rector de la UAS, donde no hubo coalición "ganó la soberbia, sobre todo de parte de Acción Nacional, aunque los candidatos y dirigentes de los partidos con candidaturas comunes no lo reconozcan".