MARTES Ť 23 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť De no ser así se enviará "un mensaje de manipulación" inaceptable, afirma
Murat, en favor de que en sesión plenaria se ratifiquen los acuerdos de la asamblea priísta
Ť Revela el gobernador de Oaxaca que en el partido se analizan propuestas para que la próxima dirigencia nacional dure de dos a tres años, con derecho a una relección
JESUS ARANDA
El gobernador de Oaxaca, José Murat, reconoció que aún no hay consenso en la dirigencia nacional del PRI sobre la realización de una asamblea plenaria que ratifique los acuerdos de las cinco mesas de trabajo previstas en la asamblea nacional de ese partido, que se celebrará los días 18, 19 y 20 de noviembre próximo.
En este sentido advirtió que en caso de que los delegados no aprueben en sesión plenaria los acuerdos definitivos, el tricolor enviaría "un mensaje de manipulación" que sería inaceptable.
En entrevista, Murat añadió que los 11 mil 700 delegados que asistirán a la asamblea del partido deberán establecer democráticamente las bases y procedimientos para que se convoque en diciembre próximo a la integración de un nuevo Consejo Político Nacional, y para que éste, a su vez, defina la forma como se elegirán al nuevo presidente y al secretario general del PRI para antes del próximo 4 de marzo.
Aun cuando se mantiene el estira y afloja entre los miembros del Consejo Político Nacional sobre los métodos para seleccionar consejeros, secretario general y presidente del tricolor, el gobernador de Oaxaca confió en que los delegados a la asamblea determinarán que sea a través del voto "democrático, secreto y directo" de toda la militancia.
En torno a la votación para elegir presidente y secretario general priístas, dijo que sólo participarán los miembros del PRI.
Aunque no cuestionó la opinión de la dirigencia del PRI en el sentido de que la asamblea de noviembre no sea electiva, Murat dejó en claro que lo que sí debe ser aprobado y definido por los delegados es que se convoque en noviembre próximo para la elección, en diciembre, del nuevo Consejo Político Nacional, y que este cuerpo colegiado emita la convocatoria correspondiente en enero para que después de una campaña electoral de 25 días la militancia defina en votación directa quiénes serán presidente y secretario general del tricolor.
Reveló que en las discusiones internas de su partido se analizan propuestas para que la nueva dirigencia nacional dure de dos a tres años, con derecho a una relección. Pero eso, afirmó, lo decidirán los delegados.
El ex senador priísta comentó que si bien la decisión de renovar la dirigencia de su partido no ha sido aprobada en las negociaciones que tienen lugar en el seno del Consejo Político Nacional, lo cierto es que "se ha avanzado mucho en la ruta de los consensos para transitar hacia una asamblea exitosa". Ello, dijo, dependerá de que se permita a los delegados participar libre y democráticamente en los debates que tendrán lugar en las cinco mesas que se desarrollarán en otras ciudades del país.
Ante la indefinición sobre la realización de una asamblea plenaria en la que se discutan los acuerdos de las mesas, Murat insistió en que "nos guste o no" tenemos que profundizar la democracia en el PRI y acordar por mayoría de delegados la forma en que se conducirá el partido. "Si no hacemos todo en forma democrática no vamos a llegar a ningún lado", indicó.
El PRI está obligado a enviar un mensaje a la sociedad en el sentido de que "quiere ser democrático", que tiene un proyecto de nación sólido y que está dispuesto a romper con el "modelo neoliberal" del Partido Acción Nacional.
La militancia priísta de Oaxaca y de otras entidades del país está a favor de convertir al tricolor en un partido democrático, y pasar "de una política virtual a una real", en la que no sean unos cuantos los que decidan en la organización, expresó.
Por su parte, Manuel Aguilera Gómez, quien será el coordinador de la mesa temática Proyecto de partido, estatutos, que se desarrollará en el puerto de Veracruz, dijo en conferencia de prensa que la idea de la asamblea es que, "de deveras, por primera vez los priístas estrenemos libertades y las sepamos ejercer con toda responsabilidad".
Añadió que es obligación de los priístas llegar a acuerdos, porque de lo contrario "el partido se romperá en añicos".