Ť El concierto del cantante inglés Elton John, la razón

Desaloja el Estado Mayor a paseantes en Chapultepec

Ť Seis horas antes del acto comenzó el retiro Ť Revisión rigurosa de pertenencias en los accesos al bosque Ť Enojo de familias y vendedores

SUSANA GONZALEZ G.

Familias de más de cuatro integrantes y grupos de amigos adolescentes, provenientes principalmente de las delegaciones del oriente y poniente del Distrito Federal y de los municipios de la zona conurbada, así como visitantes de varios estados de la República, vieron interrumpido su paseo dominical por el bosque de Chapultepec porque a partir de las tres de la tarde fueron "invitados" a abandonar las instalaciones por las decenas de efectivos del Estado Mayor Presidencial (EMP) que desde el sábado pasado se apostaron alrededor del castillo con motivo del concierto de Elton John.

Cada acceso al centro recreativo ?desde la puerta de los leones hasta la entrada por la estación de la línea uno del Metro? estuvo vigilada por un grupo del EMP que se encargó de esculcar las pertenencias de la gente mientras con vallas metálicas de color verde impidieron la libre circulación por las calzadas internas del bosque.

No hubo tiempo ni oportunidad, como otros domingos, de visitar al menos dos lugares de ese pulmón de la ciudad de México, "y mucho menos pensar aproximarse al castillo", se quejó Ramiro Mendoza, quien con su mujer y sus tres hijos sólo paseó por el zoológico, "pero apenas pudimos ver a la carrera los animales porque aunque nos dejaron entrar, nos dijeron que iban a cerrar temprano".

Muchos de los visitantes se enteraron del motivo del cierre anticipado por las mantas que desde las 14 horas trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia comenzaron a pintar frente al Monumento a los Niños Héroes contra la realización del concierto del cantante británico, organizado por la fundación Vamos México de Martha Sahagún de Fox.

"Ora que no llovió ¡nos cortaron el paseo en lo más soleado del día! Como si uno pudiera salir diario. Total, si querían hacer un concierto y juntar dinero para la gente, pues háganlo, pero no nos dejen a nosotros sin pasear por el resto de Chapultepec; no les hacemos nada, ¿para qué tanto policía?", masculló Rosendo Hernández, quien desde San Lorenzo Tezonco, en Iztapalapa, cargó con su mujer y cuatro hijos de entre diez y tres años, su hermana y dos sobrinos, así como su madre, para subirse al Castillo. "Nos tardamos una hora y media de camino en Metro y pesero, y por lo menos diez pesos de pasaje por cada uno ¿para que nos corran tan temprano?", dijo mientras toda su familia se resistía a dejar el lugar, sentada en una de las jardineras de Paseo de la Reforma, al lado del Museo de Arte Moderno.

Alfonso Morales, un albañil de la ciudad de Puebla que aprovechó el fin de semana para visitar a sus parientes de la capital, tuvo menos suerte porque luego de ir a la Villa de Guadalupe por la mañana, llegó al bosque después de mediodía y ya no tenía caso, dijo, hacer fila para las lanchas o el zoológico, "nos tuvimos que conformar con caminar y comprar por ahí algo para comer".

De Pochutla, Oaxaca, y cubriéndose los rayos del sol con su sombrero, José Ascencio se lamentó no haber hecho caso a su mujer de visitar primero el Zócalo, "pero es que nos vamos el martes y aquí dice que los lunes cierran por mantenimiento, pero resultó lo mismo, no pudimos pasearnos mucho ni subirnos a la lomita, y ni modo de regresarnos al Centro si ya estamos cansados y tenemos que llegar a Ecatepec."

"Seguro que si veníamos más temprano hubiéramos podido hacer más cosas, porque sólo estuvimos un ratito en las lanchas, pero el domingo es el único día que uno puede levantarse tarde y ni modo de sacar a los niños antes de las ocho si todavía hacía frío por la mañana", dijo a su vez Rosa Martínez, quien con sus cuñados decidió llevar de paseo a los siete chamacos de la familia, todos habitantes de la colonia Pantitlán.

"No estamos contra la intención de la esposa del presidente Fox de juntar recursos para los pobres, ojalá sea cierto, pero ¿por qué cerrar el bosque?", señaló Nayeli Torres, de 15 años, quien junto con seis amigos de la colonia Santa Ursula Coapa decidieron irse a Chapultepec, "porque no nos alcanzaba para ir a Reino Aventura o como se llame ahora".

Chapultepec siempre ha sido lo más barato para pasear, dijo a su vez Josefina Guzmán, de la Gustavo A. Madero, quien ayer se extrañó ver tantas patrullas de la policía sobre Reforma y Circuito Interior, "además de tanto señor en traje oscuro por donde quiera", y le molestó que uno de ellos la mirara "raro" por el cuchillo que traía en la bolsa. "¡Si es para las tortas! Ni modo que vaya a robar o matar a alguien, le dije, y me lo tuvo que dejar pasar".

A los comerciantes también les fue mal porque tuvieron que levantar su mercancía por lo menos con dos horas de anticipación: "Regularmente nos vamos a las seis de la tarde, pero nos avisaron que a las tres cerraban. Y si de por sí vino menos gente porque muchos pensaron que todo Chapultepec iba a estar cerrado, pues apenas si vendimos", dice Mariana Rodríguez mientras muestra la mitad de su puesto lleno con vasos llenos de fruta picada.

A los otros vendedores, esos que nada más se ponen el fin de semana y que no pertenecen a ninguna organización, no los dejaron ponerse por afuera, como en el Circuito, refirió Artemia López, también vendedora del bosque, mientras mostraba esa vía con seis patrullas de la policía preventiva adscritas a la delegación Miguel Hidalgo. En otro lado varias camionetas y un camión del Agrupamiento de Granaderos fueron estacionados afuera de la puerta de los leones, algunos sobre la misma banqueta, a pesar de que el GDF aseguró que no habría un operativo especial por el acto.