Embajada en Colombia niega tortuosidad
Distinguida directora: Por instrucciones del embajador
de México en Colombia, Luis Ortiz Monasterio, me permito con todo
respeto referirme a la carta publicada el 15 de octubre en El Correo Ilustrado,
intitulada "Tortuosos trámites para visas en embajada de México
en Colombia", en la que el señor Angel María Buitrago hace
aseveraciones carentes de fundamento, que hacen necesaria una aclaración.
Afirma el señor Buitrago que "la situación
de entrega de visas para los colombianos que desean visitar México
se ha convertido en una tarea más que tortuosa por la cantidad de
documentos que se exigen".
Sobre el particular, le informo que los documentos solicitados
para una visa de turismo son: carta de trabajo, extractos bancarios y/o
tarjetas de crédito del interesado, así como el pasaje de
avión ida/vuelta. No escapará a su atención que dichos
requisitos lejos de ser "tortuosos" son los mínimamente necesarios
para acreditar que una persona, de cualquier nacionalidad, que desea viajar
para pasear en otro país, debe presentar para comprobar que tiene
la estabilidad laboral y la solvencia económica suficientes como
para realizar ese tipo de viajes.
En adición, en el caso de México tales requisitos
se exigen por igual a prácticamente todos los nacionales de países
con los que no se tiene acuerdo de supresión de visas, bajo determinación
expresa de la Secretaría de Gobernación, máxima autoridad
nacional en materia migratoria.
Sobra decir que, en ejercicio de nuestra soberanía,
en ningún caso, ni la Secretaría de Gobernación, ni
las distintas misiones de México en el exterior, entre las cuales
la embajada en Colombia no es la excepción, exigen a los solicitantes
tener una visa de cualquier otro país como requisito previo para
conceder la mexicana. Por tal motivo, resulta irresponsable la afirmación
del señor Buitrago en el sentido de que esta embajada "notificó
a ciudadanos colombianos a quienes ya se les había otorgado su visa
de turistas que la misma había sido cancelada... (porque) se debe
contar también con la visa de Estados Unidos". Invito al señor
Buitrago a que compruebe ese hecho, ofreciendo el comunicado de la embajada
o las visas canceladas.
En cuanto a los plazos de trámites de visa en esta
representación, me permito hacer de su conocimiento que son de máximo
ocho días naturales, periodo que difícilmente puede considerarse
excesivo, si se toma en cuenta la cantidad de solicitudes que recibe a
diario la misión (un promedio de 150). No obstante que el lapso
es razonable desde cualquier punto de vista, nuestra sección consular
invariablemente informa a los interesados que si tienen alguna emergencia
que les obligue a viajar al exterior, pueden retirar su pasaporte en el
momento necesario y devolverlo a su regreso para continuar con el trámite
de la visa mexicana.
Por último, ya que el denunciante no desea proporcionar
los datos de los supuestos parientes afectados, nos es imposible aclarar
lo sucedido en ese caso particular, pero de antemano estamos en condiciones
de asegurar que su trámite no pudo haber sufrido de retrasos o exigencias
injustificadas.
Atentamente
El agregado cultural y de prensa, Eduardo Cruz Vázquez
Alertan sobre planes bélicos de EU para América
Latina
Señora directora: Le
solicitamos atentamente la publicación de la siguiente carta:
Paralela a la guerra de EU en Afganistán, se inicia
ya una guerra en América. El Departamento de Estado y el Pentágono
ubicaron de su estrategia antiterrorista a Colombia y a Perú.
Con preocupación escuchamos a los funcionarios
del gobierno de George W. Bush decir que Estados Unidos usará todos
los elementos bajo su poder: cooperación policial, intercambio de
inteligencia, herramientas financieras y poder militar --como lo está
haciendo en Afganistán--, para combatir el terrorismo en Colombia
y Perú.
No son nuevos los rumores de una intervención en
Colombia por parte del gobierno de Estados Unidos: hemos escuchado de posibles
intervenciones desde hace varias décadas, incluso para acabar con
el cártel de Medellín, el antiguo alcalde de Nueva
York sugirió bombardear la ciudad de Medellín.
En los dos últimos años, amparados en la
lucha contra el narcotráfico, los gobiernos de Colombia y Estados
Unidos han desarrollado el Plan Colombia, una estrategia de más
de 7 mil millones de dólares. Un plan que tiene un componente fundamental
de carácter militarista y que relega a un mínimo los proyectos
sociales, educativos y ecológicos.
Antes del 11 de septiembre, las Fuerzas Armadas Revolucionarias
de Colombia (FARC), el Ejército de Liberación Nacional (ELN)
y las Autodefensas Unidas de Colombia (UAC) integraban la lista de organizaciones
terroristas difundida por el gobierno estadunidense, lista que no discrimina
en ningún caso la lucha insurgente de las acciones propiamente terroristas.
Con todo lo que cambió a partir de aquella fecha,
el gobierno de Bush en su cruzada por acabar con el terrorismo en el mundo
se propone ahora iniciar una lucha contraterrorista en Colombia, de dimensiones
similares a la cruzada en Afganistán, que rechazamos porque significaría
la barbarie y más terror del que ya de por sí está
viviendo la sociedad colombiana. No se puede apagar un fuego con más
fuego, como no se acabará esa guerra en Colombia bombardeándola.
Lo que se propone es una intervención que desconoce
un proceso de paz en el que además del gobierno y las organizaciones
insurgentes participan diversas organizaciones sociales colombianas. Incluso
existe un grupo de países acompañantes, entre los que se
incluye México.
En Afganistán, la lucha contra los terroristas
no ha respetado a los pueblos grandes o pequeños; se han perdido
vidas inocentes y nunca se escucharon las múltiples voces que pedían
no a los bombardeos. ¿De qué manera pretenden perseguir a
los terroristas colombianos, cuando los paramilitares y los grupos guerrilleros
ocupan buena parte del país? ¿Se bombardeará, ya no
a Medellín para acabar con un cártel, sino a un país
entero que se ha convertido en víctima de la guerra entre paramilitares,
guerrillas y ejército?
Finalmente, y a diferencia de lo que piensa Francis Taylor,
coordinador de la Oficina Antiterrorismo del Departamento de Estado: "Quien
conoce América Latina sabe que hay dos verdades básicas de
la vida: terrorismo y narcotráfico", Colombia y Latinoamérica
significan mucho más.
Convocamos a las organizaciones sociales y a la comunidad
internacional para dar su voz de apoyo al proceso de paz, y un no rotundo
a esta cruzada que por ahora no tiene nombre, pero que ya imaginamos qué
consecuencias podría traer para todo el continente.
Tercos por la Paz. Comisión Latinoamericana
por la Paz en Colombia, Sección México. Responsable: Sonia
Sierra
Acotaciones al uso privado del Castillo de Chapultepec
Estimada Carmen: En la última página
de La Jornada del 18 de octubre, el pie de foto de la nota de Juan
Manuel Venegas sobre el próximo concierto de Elton John en el Castillo
de Chapultepec dice: "Aunque el concierto que ofrecerá será
de beneficio social, se cuestiona el uso de un espacio como el alcázar".
Creo que las cosas deberían pensarse distinto. Primero: porque el
problema de usar ese recinto es que se trata de un sitio público
y como tal, no sabemos en calidad de qué se le está alquilando
o prestando a particulares. Porque la señora de Fox no tiene un
cargo público y la fundación en cuyo nombre se hace el evento
es privada. Y segundo, y esto es lo realmente importante, porque hacer
obras de beneficio social no es de por sí moralmente superior ni
justifica cualquier cosa que se haga en su nombre, ya que la lucha contra
la pobreza requiere de acciones decididas desde el Estado y no de beneficencia.
Te saludo cordialmente
Sara Sefchovich
Aclaración de la senadora Leticia Burgos
Señora directora: El día 19 en la
sección Política el reportero Renato Dávalos de su
distinguido periódico La Jornada hizo referencia a mi persona
en relación a la deliberación que el PRD llevó a cabo
entre el CEN y legisladores en esta ciudad.
Al respecto deseo expresar que en el marco de la veracidad
y objetividad que caracteriza al periódico La Jornada me
permito desmentir lo que se me adjudica como mi dicho en la reunión.
Ciertamente criticamos, como la mayoría de los legisladores asistentes
lo hicieron, tanto los términos generales del acuerdo como el procedimiento
antidemocrático que culminó con la firma del llamado "Acuerdo
Político para el Desarrollo Nacional", ese fatídico domingo
7 de octubre, que como era de esperarse se inició la guerra de Estados
Unidos contra el pueblo de Afganistán, lo que empañó
el interés de colocar ese acuerdo en un primer plano.
El reportero Dávalos señaló en la
nota periodística que objeté el acuerdo y particularmente
el punto 9, referido a la eliminación de disposiciones discriminatorias
y al avance de la igualdad efectiva de los derechos. Debo precisar que
mi intervención en ningún momento estuvo dedicada al punto
9 del citado acuerdo. Jamás hable de ese tema en mi intervención.
En todo caso, debo señalar que no sólo comparto
lo que se aborda en el punto 9, sino que lo considero muy general, toda
vez que debería contener el qué y los cómo enfrentar
de manera integral con visión de género el desafío
de encarar las enormes desigualdades sociales, políticas, económicas
y culturales persistentes en nuestro país hacia las mujeres.
Atentamente
Senadora Leticia Burgos Ochoa
Respuesta del reportero
Señora directora: La senadora Burgos tiene
razón. Hubo una confusión en las revelaciones que hizo uno
de los asistentes a este reportero de quienes hablaron en el encuentro
a puerta cerrada.
Renato Dávalos
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