Sigue la tensión en Cachemira
Por lo menos 13 personas murieron ayer en el sector indio de Cachemira, en su mayoría separatistas musulmanes, en enfrentamientos con las fuerzas de se-guridad, en medio de los cuales los rebeldes intentaron asesinar al ministro de Desarrollo Rural local, Ajay Sadotra.
Los irregulares abrieron fuego contra el automóvil del funcionario en Narabal, a 15 kilómetros al norte de Srinagar, la capital de verano de Cachemira, pero los guardias de seguridad de Sadotra respondieron a la agresión y obligaron a los separatistas a huir.
Sólo unas horas antes de este incidente los rebeldes lanzaron dos granadas en una comparecencia del ministro de Trabajo, Ali Mohammad Sagar, en la ciudad de Baramulla, pero los artefactos explotaron en el aire.
Las fuerzas de seguridad también ma-taron la noche del jueves a cinco militantes musulmanes en el pueblo de Ka-chenara, y ayer soldados indios dieron muerte a dos miembros de Lashkar e Taibá, el mayor grupo separatista con base en Pakistán, cerca de Kulnagam.
La tensión tuvo un resurgimiento des-de que el lunes las fuerzas indias bombardearon 11 puestos paquistaníes en lo que Nueva Delhi llamó una "acción de castigo" contra los rebeldes que quieren entrar a India para llevar a cabo ataques.
En Pakistán, entre tanto, un incendio se produjo en la base aérea de la ciudad de Jacobabad, que estarían utilizando las fuerzas estadunidenses involucradas en los ataques en Afganistán.
Aunque no se ha dado un informe oficial sobre las causas del siniestro, que alcanzó poblaciones aledañas, un alto funcionario de la aviación civil paquistaní dijo que el fuego estalló a causa del clima seco. (DPA Y AFP)