VIERNES Ť 19 Ť OCTUBRE Ť 2001
Los seguidores de Bin Laden son unos "enfermos", dice Arabia Saudita
Dubai, 18 de octubre. Arabia Saudita lanzó este jueves una firme advertencia a los simpatizantes de Osama Bin Laden, calificándolos de "enfermos" de los que hay que deshacerse, mientras que la oposición afirmó que un centenar de activistas han sido detenidos en el país.
"No olviden que los que se encuentran en las grutas y escondites dañaron a su país. Desgraciadamente, entre ellos se cuentan musulmanes, pero el Islam se disocia de ellos", declaró el ministro del Interior, el príncipe Nayef Bin Abdel Azziz, aludiendo a Bin Laden, de origen saudita, y sus combatientes refugiados en Afganistán.
Citado por la agencia oficial Spa, el príncipe Nayef urgió a los servicios de seguridad sauditas a permanecer particularmente vigilantes "frente a los que intentan atentar contra la seguridad en el nombre del Islam, mientras que ignoran esta religión o se extraviaron" de ella.
"Estas personas están enfermas y no pueden ser aceptadas en la sociedad saudita aunque formen parte de ella. Cuando un órgano del cuerpo está afectado por una enfermedad puede ser amputado", agregó.
Esta advertencia carece de precedente, comentó Saad al-Faqih, portavoz del Movimiento Islámico para la Reforma en Arabia (MIRA-oposición con sede en Londres).
"Nunca sucedió que un miembro de la familia real lanzara tal advertencia directa a la población", declaró a la Afp.
El diario Al-Qods Al-Arabi, publicado en Londres, señaló este jueves que la policía había dispersado con violencia una reunión de apoyo a Bin Laden en La Meca (oeste).
Por su parte, Faqih indicó que una manifestación contra los bombardeos estadunidenses en Afganistán organizada la semana pasada en Sakaka, en la región de Al-Jawf (norte), había sido dispersada por la policía, que procedió a decenas de detenciones.
En su opinión, las autoridades están en estado de alerta y reforzaron las medidas de seguridad en varias regiones del país.
La advertencia del príncipe Nayef fue hecha después de las fatwas (decretos religiosos) proclamadas por los ulemas en Arabia Saudita y el mundo árabe criticando el silencio de algunos países islámicos frente a los ataques estadunidenses en Afganistán.
Las decisiones adoptadas por esos dignatarios religiosos, encabezados por el jeque Hmud Bin Okla al-Chuaíbi fueron acogidas positivamente por el portavoz de Al Qaeda, el grupo de Osama Bin Laden. "Apoyamos las fatwas emitidas por los grandes imanes de Arabia Saudita, sobre todo el jeque Hmud Bin Okla al-Chuaíbi, que prohibió toda cooperación con judíos y cristianos", dijo el sábado el portavoz Sulaiman Abu Ghaith en la cadena de televisión árabe Al Jazeera.
El jeque Chuaíbi legitimó los atentados perpetrados el 11 de septiembre en Estados Unidos e instó a los musulmanes a defender a sus "hermanos talibán".
El ministro saudita de Bienes Religiosos, jeque Saleh al-Sheij, también hizo un llamado al orden a los dirigentes religiosos del país. Arabia Saudita condenó los atentados del 11 de septiembre pero se abstuvo de apoyar abiertamente los bombardeos estadunidenses en Afganistán. AFP